Por una negligencia durante su viaje de egresados se rompió una vértebra y alerta sobre la desregulación de la actividad en el DNU
Camila es una joven que quedó con una discapacidad tras su viaje Bariloche. Está en juicio con la empresa, el cual lleva casi 10 años y no tiene indicios se resolverse pronto. El mega decreto de Milei elimina tres leyes que regulaban, entre otras actividades, los viajes de egresados y el turismo estudiantil.
Camila Hoyo Veigas o Camila Milagros como prefieren que la llamen es una joven actriz y escritora que a los 17 años, producto de una negligencia en su viaje de egresados, quedó discapacitada.
El lunes 25 de agosto de 2014 en el anteúltimo día de su viaje de egresados en Bariloche, los coordinadores de Up Grade, la empresa de turismo estudiantil con la que viajaron, les ofrecieron comprar la excursión “4x4 night” en el complejo El Rebenque.
Durante la excursión Camila se sentó en la parte de atrás de la camioneta, donde no había cinturón de seguridad y los asientos estaban sueltos. Como el casco tampoco tenía traba, tenía que agarrarlo para que no se le cayera. Pese a las constantes quejas de la joven por las condiciones de seguridad, la excursión siguió su curso.
Camila recuerda salir volando para arriba, golpearse la nuca fuerte contra el techo, caer y chocar de lleno contra el fierro que estaba abajo del asiento que se había salido. Por el golpe sufrió la fractura de una vértebra.
Fue llevada al Hospital Privado Regional de San Carlos de Bariloche donde, durante más de nueve horas después del “accidente”, los representantes de la empresa no le dieron su teléfono celular. “Desde el primer minuto en el que me bajé de la camioneta, le pedí a los coordinadores que me dejaran llamar a mi vieja. Ellos escondieron mi celular y no me dejaron hablar con nadie”, recuerda. Recién a las 3 am pudo hablar con su mamá.
“Un empresario de la aseguradora de Up Grade llamó a mi mamá presentándose falazmente como médico, le dijo yo había sufrido un ‘accidente’ y ‘tenía una fisurita en una vértebra, pero que no era nada’”, contó.
Un avión sanitario la llevó de Bariloche a CABA donde la operaron de urgencia. “Como recuerdo de Bariló no me pude traer chocolates, pero sí una columna rota y un cambio de vida”, expresó. Fue operada tres veces, la primera el 1° de septiembre de 2014, la segunda en agosto del 2015 y la última fue en 2019.
“Los tiempos de la justicia, fiscales, expedientes y abogados no comprenden de urgencias y dolores”, manifestó a Data Clave. El juicio penal se resolvió el Bariloche en 2019, como no tenía abogado matriculado ahí el caso quedó a cargo de la Fiscalía. Al conductor de la 4x4, quien ya tenía antecedentes y un accidente previo, lo condenaron a 3 años excarcelables y la prohibición de poder manejar cualquier tipo de vehículo. Sin embargo, al mes de la condena fue encontrado manejando un camión. El predio siguió funcionando y la excusión siguió haciéndose.
“A las empresas las estamos demandando por daños y perjuicios, porque si Up Grade no me vendía esa excursión altamente insegura, yo hoy no sería hoy discapacitada”, explicó Camila. El juicio civil se está llevando a cabo en CABA y en agosto del 2024 se cumplen 10 años. “No avanza porque la jueza no dicta sentencia. Cada vez que se aproxima la culminación del plazo para dictar sentencia, ella saca de nuevo una audiencia conciliatoria y ellos no quieren conciliar nada”, precisó y subrayó: “Para todos ellos lo que yo pido es un vuelto”.
En cuanto a las consecuencias de este accidente en su vida cotidiana, Camila manifestó: “La pericia psicológica me dio 60 % de incapacidad y la motriz 85%”. Poder alzar a upa a su sobrinito, viajar en colectivo sin correr riesgo, disfrutar un día de lluvia, poder estar muchas horas parada, bailar con sus amigas son algunas de las cosas que ya no puede hacer. “No hay días que no tenga dolor”, marcó y agregó: “Realmente soy discapacitadas y la sociedad no está adaptada para esas discapacidades y menos para las que no son visibles”.
“Antes del viaje quería hacer el ingreso a la UNA de Artes Dramáticas, era uno de los deseos más profundos que tenía desde chiquitita y no pude cumplirlo porque tengo prohibido hacer actividad física de riesgo”, expuso y contó que ahora está cursando licenciatura en Artes de la Escritura en la UNA.
“Esto empeora cada un par meses, por el dolor hay días enteros que no me puedo mover. El año pasado prácticamente no pude cursar. Además de una depresión muy fuerte tuve muchísimo dolor porque me hicieron unas infiltraciones que salieron mal y no puedo estar sentada en la facultad. Y cuando lo plantee en el rectorado no hicieron nada”, relató.
“Estoy terminando de asumir que esto va a ser así y la injusticia que se siente es enorme porque yo no nací así”, señaló y sentenció: “Lo que me cambió la vida no fue un accidente, fue la negligencia empresarial”.
Cambios en el DNU
El mega decreto que firmó Javier Milei ya comenzó a regir. En él se afecta a los viajes de egresados y el turismo estudiantil ya que la norma deroga 3 leyes que regulaban la actividad y tiene consecuencias en la seguridad y el financiamiento de los viajes.
Las leyes que derogan son la N°18.828 de Reglamentación de la Hotelería, la 18.829 de Agentes de Viajes, y la 26.356 de Sistemas Turísticos de Tiempo Compartido.
Si bien la Ley N° 25.599 de Turismo Estudiantil, que regula a los viajes de estudios y de egresados, no fue derogada no es una ley independiente sino que se circunscribe a lo establecido por la ley de Agentes de Viajes.
Por ejemplo, la Ley N°18.829 establecía que “el Poder Ejecutivo, por intermedio del organismo de aplicación podrá negar el otorgamiento o cancelar las licencias ya otorgadas a las personas o agencias cuyos integrantes registren antecedentes personales, morales, comerciales, bancarios o judiciales desfavorables, similares a los que inhabilitan para el acceso a las funciones o cargos públicos”.
Respecto a estas modificaciones Camila cuestionó: “Me parece muy preocupante y alarmante. Si a mí las empresas pudieron hacerme esto con todas las regulaciones que el Estado que les imponía, no quiero ni pensar en la impunidad con la que se van a manejar cuando no tengan que presentar declaraciones juradas ni ningún tipo de seguro”. Y agregó: “No tratan con adultos, que si así fuese también estaría mal, sino que juegan con algo tan endeble como los pibes”.
Las modificaciones fueron incluso rechazadas por la Federación Argentina de Asociaciones de Empresas de Viajes y Turismo (FAEVyT). Mediante un comunicado la Federación expresó que “hablar de monopolio de las agencias de viajes es desconocimiento”. En este sentido, agregó que “se trata, muy por el contrario, de uno de los sectores más diversos y descentralizados del turismo”.
“Mejorar la competitividad no significa la eliminación de todo registro, ya que la existencia de un control concreto disminuye la cantidad de casos que van a defensa del consumidor y protege a los pasajeros garantizándoles que están contratando servicios en agencias habilitadas, capacitadas y constituidas por profesionales idóneos para dar respuesta”, manifestaron desde la Federación.