“Es un golpe que le dimos al gobierno” y “esto se va a poner peor”. Esos son dos de los mensajes que se le encontraron al jefe de los “copitos”, Nicolás Gabriel Carrizo, y por los cuales será nuevamente indagado este 31 de enero en la causa donde se investiga el intento de asesinato contra Cristina Fernández de Kirchner.

Cabe recordar que en la causa ya tienen procesamiento firme Fernando Sabag Montiel y su novia Brenda Uliarte. Para la jueza María Eugenia Capuchetti, el asesinato comenzó a planearse en abril del año pasado cuando Uliarte compró un arma. Además, en la causa figuran una serie de mensajes que Brenda le envió a su amiga Agustina Díaz donde hablaba de “ir con el fierro” y pegarle “un tiro a Cristina”: “el tema es cómo porque la vieja tiene seguridad”, agregaba.

Sabag está detenido desde la noche del 1 de septiembre, tras apuntar y gatillar con esa Bersa calibre 32. El domingo 4 de septiembre fue apresada Uliarte. Ambos fueron considerados coautores del “homicidio agravado por el empleo de armas de fuego, alevosía y el concurso premeditado de dos o más personas, en grado de tentativa”.

Carrizo está, por ahora, en un escalón por debajo en esa consideración de responsabilidades: fue considerado partícipe secundario. Tal como repasó Data Clave, en la causa figuran ahora nuevos mensajes que dan otra dimensión a su participación. La misma noche del 1° de septiembre, escribió: "Recordá esta fecha”, “Esta hdp (sic) ya está muerta”, “Generar miedo para que el gobierno sepa con quienes se están metiendo”.

Lo que reclama la querella que representa a Cristina es que sea considerado parte de una asociación ilícita. Por otra parte, una vez que se reanude la actividad judicial a partir del 1° de febrero, la Cámara de Casación tendrá en sus manos la posibilidad de revisar la recusación contra Capuchetti, algo en lo que los abogados de la vicepresidenta vienen insistiendo. La Sala II, a través del juez Guillermo Yacobucci, es la que intervendrá.

El otro conflicto que se avizora tiene que ver con la llamada “Pista Casablanca”, que involucra al diputado nacional Gerardo Millman. Tras una ida y vuelta, finalmente quedaron a disposición los celulares -y la información que los aparatos contienen- de las dos asesoras Ivana Bohdziewicz y Carolina Gómez Mónaco.

Lo que se intenta vislumbrar es si fue cierto que Milman tenía conocimiento sobre el intento de asesinato y si pronunció la frase “cuando la maten, voy a estar camino a la costa”. La querella solicitó un peritaje bien amplio pero la jueza Capuchetti consideró que debía ser algo más acotado. 

En Tribunales explicaron que lo que se quiere es evitar una ”excursión de pesca”, una modalidad que suele aplicarse en las causas para encontrar cuestiones que quizás nada tienen que ver con el expediente principal pero que después son “utilizadas” con otros fines. De todas formas, esta disputa –como todas las otras-, la definirá también la Cámara Federal, con intervención de los magistrados Leopoldo Bruglia, Pablo Bertuzzi y Mariano Llorens.