Como parte de la agenda del G20, la primera dama, Fabiola Yañez, participó del almuerzo organizado para las primeras damas del G20 donde avanzaron sobre los desafíos del nuevo contexto social tras la pandemia.

La reunión se dio en el marco de la gira del presidente Alberto Fernández. “Nuevamente, expresé el compromiso de la Argentina para fortalecer las relaciones bilaterales con el resto de las naciones. Me enorgullece ser testigo en esta cumbre de la fuerte presencia y liderazgo de las mujeres que representan los ideales de sus respectivos pueblos”, dijo Yañez.

Entre sus actividades, Yañez inauguró el sábado en el Consulado Argentino en Roma una “Sala y Lactario amigable para las infancias”, junto a la cónsul en Roma, Ana De la Paz Tito y a la esposa del embajador argentino en Italia, Monica Manterotti. La sala contendrá a las familias que asisten diariamente al consulado para realizar trámites en la institución.

Fabiola Yañez participó en un almuerzo organizado para las primeras damas del G20

“La promoción de la lactancia y la incorporación de este tipo de espacios no debe ser solamente una preocupación de las mujeres. Celebro y valoro la creación de la sala y lactario en el Consulado, porque es con el apoyo de toda la sociedad, que podremos propiciar entornos públicos más inclusivos e igualitarios que preserven la maternidad y la niñez”, remarcó.

Asimismo, se reunió con el representante argentino ante la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) Carlos Cherniak y, la directora del Fondo Internacional del Desarrollo Agrícola (FIDA), Rossana Polastri, cuya institución financió el programa “En nuestras manos”.  Este plan integral, que continuará en vigencia hasta 2024, busca mejorar las condiciones de trabajo de las mujeres de la agricultura familiar, campesina e indígena, como también generar centros productivos agroecológicos de formación, contención y apoyo a las víctimas de violencia de género.

Yañez también recibió la propuesta -por parte de la representante del FIDA- de ser embajadora de dicho programa en América Latina y el Caribe. “Es un honor poder representar el reclamo de visibilidad de la problemática de género en el sector rural. Destaco el impacto de esta alianza auspiciosa que continuará creciendo, para potenciar aún más el trabajo que se viene realizando por superar la inequidad de género en la producción rural y por la autonomía de las cooperativas rurales”, concluyó.