Durante su gira por los Estados Unidos, el presidente Javier Milei disertó este lunes en la Conferencia Global del Instituto Milken en Los Ángeles.  Sin embargo, la exposición no fue en vivo sino que tuvo que ser grabada por falta de tiempo. 

En su discurso, el Presidente recordó su exposición el Foro Económico de Davos y aseguró que “occidente está en peligro porque sus líderes hace tiempo se alejaron de las idead de la libertad” y que “en vez de defender las ideas que generaron la prosperidad escuchan cantos de sirena que conducen inexorablemente al socialismo y en consecuencia a la pobreza”. 

En esta línea, el mandatario afirmó que en Argentina todo esto “ya ocurrió a los largo de los últimos cien años” y que el resultado fue “pasar de tener el PBI per capita más alto del mundo a tener un país donde el 60% de la población es pobre”. 

Asimismo, durante su exposición, Milei realizó una ”defensa del capitalismo” y se refirió a los empresarios presentes como “los verdaderos héroes de la historia del progreso de occidente”. 

“Lejos de ser la causa de nuestros problemas, el capitalismo de libre empresa como sistema económico es la mejor herramienta que, como especie, hemos conocido para terminar con el hambre, la pobreza u la indigencia a lo largo y ancho del planeta”, ´precisó y señaló que “el empresario que arriesga capital en pos de una ganancia es un benefactor social”. 

Milei en la Conferencia Global: “El empresario que arriesga capital en pos de una ganancia es un benefactor social”

Además, sostuvo que el sector privado “tiene un mandato de responsabilidad social” pero que “no tiene que ver con hacerse el moralista o culposo”. La verdadera responsabilidad social de un empresario es un efecto natural del funcionamiento libre de su propia actividad económica: el mandato de producir viene y servicio de mejor calidad o mejor precio”, detalló.

En este sentido, explicó que “no es un mandato de moralida superficial que se cumple regulando el libre mercado, es un mandato de gloria que se cumple desatándolo”. 

Por otro lado cuestionó el modelo del “Estado grande” al cual se refirió como “una cárcel”. “Para nosotros la única tarea del Estado es proteger la vida, la libertad y la propiedad privada de los argentinos, para que cada uno pueda ser arquitecto de su propio destino”, indicó. 

“Hoy por primera vez en 150 años y a contramano de un mundo cada vez menos libre, la Argentina se convierte día a día en un país más libre”, sostuvo. 

Por último, envió un mensaje a los empresarios argentinos y les advirtió que “no se duerman en los laureles porque encontrarán que hay actores de afuera con más capital y mayor capacidad de asumir riesgo, dispuestos a hacer la inversiones que el país necesita”.