El juez federal Marcelo Martínez de Giorgi procesó sin prisión preventiva a “Dali Revolución”, la mujer que ofrecía un arma para atentar contra la ex presidenta Cristina Fernández Kirchner en los grupos de chats de Revolución Federal.  

“No es una mala idea. Tengo una 9 mm, cualquier cosa me avisan”, expresó Lidia Margarita Casciano previo al intento de asesinato de la entonces Vicepresidenta el 1 de septiembre de 2022. Además, en otro mensaje ofreció: “Tengo una 9 mm y el mástil de la bandera (el consolador de la Cerruti) y tengo gas pimienta”. 

Ahora Casciano fue procesada por “realizar manifestaciones que inciten públicamente a la violencia”. Este delito contempla penas de entre tres y seis años de cárcel. Además el juez le trabó un embargo por un millón de pesos.

Martínez de Giorgi consideró que estas expresiones “no puede considerarse como el libre ejercicio del derecho de la libertad de expresión, excediendo a la expresión de ideas”.

“Las manifestaciones llevadas a cabo por Lidia Casciano encuentran adecuación típica en el delito de incitación pública a la violencia colectiva”, insistió el magistrado y descartó que no hubiera existido delito porque la agresión no se concretó.

“Este tipo penal, se trata de los llamados de acción peligrosa concreta, por cuanto la ley los reprime por la mera incitación. No se requiere para su configuración resultado alguno”, precisó y subrayó: “Es independiente de todo resultado”.

Mientras tanto, en su defensa “Dali Revolución” manifestó que “nunca pasó por su mente hacerle daño a Cristina Kirchner ni facilitar nada”. Además, aclaró que cuando hizo referencia al “mástil”, fue “en forma de chiste ya que estaba bromeando respecto a una funcionaria que como política pública, había regalado consoladores de madera”.