Por estas horas, se viven momentos de tensión en el municipio de Pinamar que comanda el dirigente del PRO, Martín Yeza. Sucede que el Banco Provincia envió una carta documento donde intima a la comuna a que devuelva los 2 millones de pesos del fraude realizado a la administración estatal con las Tarjetas Alimentar.

Cabe recordar que el pasado 22 de junio la Justicia dictó el procesamiento de una empleada municipal y 4 cómplices por la estafa al Estado Nacional. Según consta en la causa, están señalados por transferirse el crédito de 250 plásticos por un total de 2 millones de pesos. Ahora, la entidad bancaria exigió a Yeza “reintegrarle inmediatamente” al Ministerio de Desarrollo de la Nación la totalidad del dinero desviado en dichas maniobras.

La carta documento tiene fecha del 20 de julio de 2021 y que lleva la firma de su presidente, Juan Cuattromo. “Me dirijo a Ud. en mi carácter de Presidente del Banco de la Provincia de Buenos Aires, atento a la situación generada con causa en el desvío de fondos en beneficio de dependientes de ese Municipio, asumida por esa Municipalidad de Pinamar en la Cláusula 7° del Convenio suscripto con el Banco que presido en fecha 26 de octubre de 2020”, comienza el escrito.

Y agrega: “se intima al Municipio a asumir la responsabilidad que le compete, procediendo al inmediato reintegro al Ministerio citado de la suma de fondos públicos involucrada que, según se denunciara en la causa penal, asciende al presente a $ 2.050.990”. Y aclara que será sin perjuicio de la cifra que pudiera resultar de la investigación en curso, con los costos e intereses a determinarse, “bajo apercibimiento de iniciar las acciones legales pertinentes”.

La carta documento dirigida a Yeza.

El origen de la causa penal data de marzo pasado y se desprende de la denuncia de Nora Ponce, ex concejal y ex titular de Desarrollo Social. Un beneficiario de la Tarjeta Alimentar fue hasta la oficina a retirar el plástico que le correspondía, pero la tarjeta no tenía saldo. “Cuando detecto que hay un monto que no corresponde no hago la entrega, le pido a la titular que por favor me espere, hago las consultas pertinentes al Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, el cual me informa que no había habido movimientos y que los saldos habían sido utilizados”, aseguró Ponce en declaraciones públicas en aquel momento.

Y agregó: No había manera de que esto sea así, porque la tarjeta no había sido entregada. Hago la consulta al banco para ver si el banco había hecho algún movimiento, que tampoco había sido así. A raíz de eso decido realizar la correspondiente denuncia en la fiscalía”.

Ante esta situación, la Policía Federal allanó las sedes de la Secretaría de Deportes y Desarrollo Social del municipio de Pinamar, y detuvo inicialmente a 6 personas, entre ellas dos funcionarias municipales, por irregularidades en la entrega de la Tarjeta Alimentar. Meses más tarde, el 22 de junio la Justicia dictó el procesamiento de una empleada municipal y 4 cómplices por la estafa al Estado Nacional con las tarjetas Alimentar. 

Una de las procesadas es Andrea Ríos, de 52 años, secretaria privada de la directora general de Gestión y Coordinación Territorial de la Municipalidad de Pinamar, Nora Ponce, quien inició la denuncia. Además de Ríos, la Justicia imputó por estafa y asociación ilícita, al esposo, José Fons, y tres presuntos cómplices: Nicolás Ambao, de 47 años, Carlos Rosas, de 51 y Diego Borea, de 40.

De esta manera, a fiscalía especializada en delitos de corrupción del departamento judicial de Dolores, del fiscal Mario Pérez, solicitó las detenciones y desde el Juzgado de Garantías N° 6 de Villa Gesell, del magistrado Diego Olivera Zapiola, dispusieron los procesamientos de los 5 sospechosos. Sobre Ríos, Fons y Ambao se dictó la prisión preventiva y se dispuso un embargo de 10 millones de pesos.

Según consta en la Justicia, Ríos se apoderó de al menos 55 tarjetas del programa Alimentar. Su defensa, floja de papeles, fue que en un momento dado “la caja con las tarjetas quedaron debajo de la escalera ‘a disposición de cualquiera”. La acusación que pesa sobre ellas es que le dio esas tarjetas a su marido y éste a los otros tres cómplices que fueron claves a la hora de usar las tarjetas “falsamente” en comercios a “través de múltiples operaciones”. Vía “Naranja pos” registraron un gasto de $592.000 y en “Terminal Posnet” se apropiaron de de $1.500.000.

 
Clima caliente en Pinamar a pesar del frío

Los tironeos con el Banco Provincia vienen desde hace tiempo. En efecto, semanas atrás se vivieron horas de desconcierto y tensión en el municipio debido a que se cumplía el medio mes y los trabajadores municipales no habían cobrado su salario. Incluso decidieron llevar adelante una medida de fuerza hasta tanto recibieran el pago. 

Mientras los trabajadores ponían el foco en Yeza por el atraso en el pago de sus haberes, el jefe de Gabinete comunal, Federico Panzieri, culpó de esa demora al Banco Provincia por no girarle a tiempo un descubierto para que el distrito pueda hacer frente a sus obligaciones.

Este malestar se suma a las tensiones con los concejales de la oposición que en su momento y por la causa de la estafa por las Tarjetas Alimentar, llamaron a una interpelación con el intendente para que de explicaciones y no se hizo. Fue en su reemplazo el secretario de Desarrollo, que no dejó a los ediles conformes, quienes calificaron su participación como “paupérrima”.
 

Por su parte, el titular de la Federación de Sindicatos Municipales Bonaerenses (Fesimubo), Rubén García, denunció en su momento a través de un comunicado que “Yeza sólo dice que no puede cubrir el total de la masa salarial debido a la baja en la recaudación de las tasas y no se pone colorado. Estamos hablando de Pinamar, un municipio rico. Entonces que les queda a los otros distritos. ¿Cómo no va a poder pagar lo que corresponde?. A mí me parece que se trata de mala administración y hasta tiene un tinte ideológico”.

Por su parte, el concejal del Frente de Todos, Carlos Conti, manifestó a Data Clave que "hoy seguimos con un departamento Ejecutivo que sigue administrando mal los recursos municipales, que está utilizando recursos afectados para abonar gastos corrientes. No tienen control de gastos. Nos encontramos con una gestión económica y financiera que viene deficitariamente".

Respecto de la polémica con las Tarjetas Alimentar, el edil señaló: "el municipio dice que son trabajadoras municipales pero nosotros decimos que son funcionarias de Yeza. Todos en la ciudad saben que ambas eran del mismo espacio de Nora Ponce, que era la directora que estaba a cargo de las tarjetas". 

Conti detalló además que en marzo de este año, Ponce fue relocalizada en el municipio en marzo de este año y meses más tarde anunciaron su salida del gabinete porque "quedó muy afectada psicológicamente por la situación de las Tarjetas Alimentar".  Y disparó: "cuando explotó el tema de las tarjetas, el intendente se fue de vacaciones".