Este jueves el Senado retomó la sexta y última ronda de exposiciones en el plenario de comisiones que trata la Ley de Bases y el paquete fiscal. 

Sin embargo, el oficialismo tuvo pocas posibilidades de obtener dictamen y tratar el proyecto la semana que viene como lo había planificado en un principio. Hasta último momento desde la presidencia del Senado hicieron circular la idea de hacer un doble debate de comisiones sumando el paquete fiscal a la agenda pero tuvieron que patearlo para la próxima semana.

El Gobierno llevó a cabo una jornada de intensas reuniones con los bloques de la oposición “dialoguista”. Se sumó a las negociaciones la vicepresidenta, Victoria Villarruel. Hasta el momento los encargados eran el ministro del Interior, Guillermo Francos y el vicejefe de gabinete, José Rolandi. 

Villarruel recibió a los funcionarios del Gobierno en su despacho en el Senado. También se lo vio por momentos al presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem. 

A lo largo de esta semana, Rolandi fue quien atendió puentes con aquellos senadores de bloques aliados y federales que plasmaron sus disidencias con respecto a algunos capítulos de ambos mega proyectos.

El funcionario nacional intentó pasar en limpio las modificaciones propuestas por, principalmente, el radical Martín Lousteau (CABA), Guadalupe Tagliaferri, del PRO (CABA), y otros bloques federales como, por ejemplo, Unidad Federal, que integran Edgardo Kueider (Entre Ríos) y Carlos Espínola (Corrientes).

Los puntos de mayor controversia que cosecharon las iniciativas fueron el Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI), el blanqueo de capitales, la moratoria previsional, algunos puntos de la reforma laboral, etc. A diferencia del bloque de Diputados, la UCR senatorial limó asperezas y elevó un pedido conjunto con los cambios pretendidos.