A pesar de las críticas por parte de la oposición y de casi todo el sector empresario, el Gobierno busca aplicar un impuesto a la “renta inesperada” que tuvieron algunas empresas ante el nuevo escenario internacional que desató la invasión a Ucrania. Mientras tanto, el presidente Alberto Fernández recibirá esta tarde a la cúpula de la Unión Industrial Argentina.

El encuentro, previsto para las 16, se enmarca en un pedido que realizó la entidad para llevarle al Presidente su “Libro Blanco” con propuestas de política industrial. Sin embargo, se espera que en la reunión surjan temas vinculados al nuevo gravamen en el que trabaja Economía, la inflación, problemas logísticos y otros asociados a la guerra en el este de Europa.

Al encuentro asistirá la mesa de presidencia de la UIA, conformada por el presidente, Daniel Funes de Rioja, el secretario Miguel Ángel Rodríguez, y los vicepresidentes de la casa fabril. El documento que presentarán al mandatario fue conformado en colaboración con todas las divisiones regionales del país y hace poco aprobado por el Consejo General, máximo órgano de la entidad.

Este será el primer cara a cara luego de que el lunes pasado Fernández y su ministro de Economía, Martín Guzmán, anunciarán bonos de $18.000 a los sectores “más desprotegidos” y la intención de consensuar un “mecanismo” para capturar parte de la ganancia “inesperada” que tuvieron algunas firmas por la suba de precios internacionales. Rápidamente, la oposición se plegó al reclamo empresario en contra de esta posibilidad.

Por su parte, el miércoles pasado los representantes sectoriales y regionales de la junta directiva de UIA ya manifestaron su “preocupación por la posible creación de una alícuota adicional dirigida a empresas de todo el país” y por un posible “impacto negativo en la inversión, actividad y el empleo”

Según explicó Martín Guzmán, el universo se enfocará en el conjunto de empresas que tenga ganancias netas imponibles altas superiores a los $1.000 millones en el año, “que en 2021 fue sólo el 3,2% de las compañías”. Además, se incluirá un criterio que establece que, si la renta inesperada se canaliza hacia la reinversión productiva, el monto de la contribución será menor.

En ese sentido, desde Economía señalan que los alcanzados serán sólo el 1% de las compañías a nivel nacional, por lo que el nuevo gravamen se cobrará solamente a entre 100 y 200  firmas.  

Casualidad o no, el Fondo Monetario Internacional se manifestó a favor de “cobrar impuestos temporales más altos” en tiempo de pandemia o guerra debido a que en situaciones como la actual, algunas firmas se benefician como nunca antes y otras se ven muy perjudicadas. En esa línea, Martín Guzmán ratificó el programa económico del FMI y aseguró que se cumplieron las metas del primer trimestre que planteó el acuerdo con el organismo.

En este marco, el Gobierno trabaja para “anclar expectativas” con acuerdos junto a empresarios y sindicalistas para contener la inflación. El 6,7% de marzo generó un cimbronazo, mientras que las consultoras anticipan que abril sería superior al 5% y el año cerraría cerca del 60%

En el mundo se ven datos de inflación que no se dan desde hace décadas, Argentina no sería la excepción. Para enfrentar esa situación, se impulsó el programa Precios Cuidados y un fideicomiso para el trigo, justamente con los sectores que se manifestaron en contra de gravar las ganancias por la guerra.