El Ministerio de Economía licitará el martes siete bonos en pesos, algunos a tasa fija y otros atados a la inflación, todos con vencimiento no más allá de mayo del año que viene, y realizará un canje de bonos, con el fin de refinanciar los $273.000 millones que vencen este mes.

Para esto ofrecerá, sin precio mínimo, cuatro Letras del Tesoro, dos de ellas con vencimiento el 29 de octubre, una a descuento, y otra a tasa variables más 2,75%. La tercera sin precio mínimo y a descuento cierra el 30 de noviembre y la cuarta el 31 de diciembre. Una quinta Letra, con precio mínimo de $ 821, se ofrece a descuento y con cierre el 31 de enero del 2022.

A esta oferta se le suman otros dos bonos justados por inflación, ambos sin precio mínimo, un con cierre el 28 de febrero y otro, el de más largo plazo, el 23 de mayo.

A todo esto se le suma un canje por el cual se pueden entregar bonos atados a la inflación que vencen el 5 de agosto , por otros cuatro títulos. Algunos de ellos con cierre en el 2023.

Lo cierto es que de los $273.000 millones que vencen este mes, $109.000 millones vencen esta semana.

La cartera que dirige Martín Guzmán confía en refinanciar esta deuda, así como lo hizo con la que venció durante el primer semestre.

No solo eso, según un informe de la Secretaría de Finanzas, se obtuvieron $11.305 millones de financiamiento neto gracias a la normalización del mercado de deuda en pesos.

Para esto permitió a los bancos deshacer sus posiciones en Pses y Leliqs que son de corto plazo, un mes, para tomar estos bonos que son a más de 30 días, pero que redunda en una mayor emisión secundaria de dinero.

Sin embargo, esta “solvencia financiera” afecta el nivel de préstamos del sector privado, ya que tres de cada cuatro pesos que reciben los bancos se prestan al Estado, destacó un informe de la consultora Econométrica.

Esto se produce en el marco de “una marcada reducción en la demanda de préstamos corporativos y personales, que, sumada a que las dificultades financieras de un buen número de empresas e individuos determinaron que no pudieran calificar para recibir un préstamo”, agrego el informe.

En junio, la deuda bruta total trepó a U$S343.519 millones, lo que implica un incremento de U$S30.000 millones con relación a las obligaciones que había a fines de noviembre de 2019, según el último informe mensual del Ministerio de Economía.

Del total de la deuda actual, U$S85.527 millones está emitida en pesos al tipo de cambio oficial ($96). Sin embargo, lo preocupante para los economistas es que, de ese monto, U$S43.191 millones está atado a la variación de la inflación, por lo tanto no se puede “licuar”.