El Ministerio de Economía licitará este jueves más de una decena de Letras y Bonos, todos ellos en pesos y con vencimiento entre junio de este año y mayo del 2027, como parte de su programa para financiar $950.000 millones.

Hasta el primer trimestre, el Tesoro tuvo un gran desempeño refinanciando todo lo que tenía que afrontar y quedándose con un “sobrante”.

Pero en abril, el Tesoro enfrentó vencimientos por $700.990 millones y colocó instrumentos por un valor efectivo de $632.776 millones, quedando algo más de $ 68.200 millones por debajo de lo que necesitaba.

Eso a pesar de haber colocado un 49% de bonos ajustables por inflación (CER), otro 10% vinculados a la variación del dólar; un 38% a instrumentos a tasa fija y a muy corto plazo, no más allá de 90 días, y el restante 3% a instrumentos a tasa variable.

La economista Marina dal Poggetto advirtió que la deuda en pesos, sumada la del Tesoro y la del Banco Central “alcanza a los US$ 84.000 millones de dólares, la mitad de la emitida en dólares, con el problema es que a corto plazo y no tenés horizonte” de repago.

“En Argentina cada cuatro años tenés un accidente” con la deuda, advirtió la economista de EcoGo para quien desde el gobierno, con la aceleración de la devaluación, “tornás peligrosamente inflacionario un programa que ya era inflacionario”. Entre marzo de este año e igual mes del 2021 el stock de deuda bruta se incrementó por el equivalente a US$ 40.768 millones, informó la Secretaría de Finanzas.

El documento destacó que de total de la deuda, el 69% está emitido en moneda extranjera, mayormente dólares. Del otro 31% emitido en moneda local, 61%, es decir unos US$ 49.600 millones, están emitidos en bonos ajustables por inflación, por encima del compromiso asumido con el Fondo Monetario Internacional que alcanzaba a US$ 46.632 millones.

Desde la consultora Equilibra, consideraron que Economía debería, entre la licitación de este jueves y la del viernes 27, conseguir alrededor de $ 1,1 billones, para cubrir los $ 950.000 millones que vencen en mayo y mantener la pauta del financiamiento neto en torno al 123%. De esa manera, quitaría presión sobre el Banco Central, según las proyecciones de la consultora.