El Gobierno publicó hoy en el Boletín Oficial la creación de un fideicomiso acordado con la industria aceitera para “desacoplar” los precios internos de esos productos de lo de exportación.

En medio de la puja con el campo por el aumento en los precios de los alimentos, los ministros de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, y de Agricultura, Ganadería y Pesca, Luis Basterra, firmaron la resolución conjunta 1/2021 estableciendo la creación de este fideicomiso privado surgido del acuerdo firmado por los distintos actores del mercado de la soja y el girasol.

El Gobierno publicó el acuerdo con el sector aceitero y le pone presión al campo

En los próximos 15 días hábiles “los diferentes participantes de la cadena de comercio de la industria aceitera constituirán un fideicomiso privado, que no demandará ninguna erogación estatal, con el objetivo de sostener en el mercado interno un precio accesible de los aceites envasados para los consumidores, así como su pleno abastecimiento”, destaca la normativa oficial. 

El fideicomiso “deberá velar por el interés económico general mediante un sistema interno de compensaciones que permitirá estimular la libre competencia, que garantice el abastecimiento interno y asegure precios justos y razonables para los consumidores”, agregó.

El texto publicado hoy también dispone que el precio base de aceites envasados se ajuste de acuerdo a una fórmula durante la vigencia del fideicomiso. Asimismo contempla que la duración del compromiso termine el 31 de enero de 2022 y deja abiertas instancias de revisión periódicas.

La vicejefa de Gabinete Cecilia Todesca, destacó la semana pasada que el gobierno “está abierto al diálogo” con los distintos sectores de la producción rural para alcanzar mecanismo que permitan bajar los pecios de los alimentos, ya que aducen que la suba del precio de los granos a nivel internacional, alienta el aumento.

El domingo, el propio presidente Alberto Fernández envió un ultimátum al campo entendiendo que desde el sector agropecuario están aumentando por demás y que sólo habrá dos soluciones al conflicto: retenciones o cupos a la exportación en la plaza local.

Ante esto, Jorge Chemes, titular de las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) insistió en que “no deja de sorprender la falta de capacidad de entendimiento por parte de los funcionarios cuando le tratamos de transmitir de que el sector primario, además de no ser formadores de precios, es el que menos participación tiene en la cadena de cualquier producto”.

“Estamos en contacto con todas las entidades, preocupados por la situación. Con el ánimo que hay en el sector productivo, es muy probable que genere conflicto”, advirtió Chemes.

El año pasado, la inflación alcanzó a 36,1%, pero el aumento en el rubro “Alimentos y Bebidas” ascendió al 42,1%.