Una pareja con dos hijos necesitó en agosto de $ 45.477,66 para comprar alimentos, indumentaria y transporte, que conforman la Canasta Básica Total (CBT), el nivel mínimo de ingresos para no caer debajo de la línea de la pobreza, informó hoy el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) .

El precio de la CBT aumentó 2,1% durante agosto, lo que representó una aceleración respecto al 1,6% que había registrado en julio, o 1,7% en junio, a pesar de que se mantienen "congeladas" las tarifas de los servicios públicos.

Esta "retención" de los precios del transporte, la energía eléctrica o el gas, hizo la diferencia con respecto al aumento del precio de la Canasta Básica Alimentaria, que aumentó 2,6% en agosto, (contra el 1,6% de julio) por lo que el mismo grupo familiar requirió de $ 18.792,42 para comprar la cantidad mínima de comida y no caer en la indigencia.

El Indec tiene previsto dar a conocer el 30 de septiembre la variación del Índice de Pobreza y el de Indigencia durante el primer semestre del año, signado por una caída del 12,9% en la actividad económica, y un aumento en la desocupación, según cifras oficiales.

El profesor de la Universidad Di Tella, Martín González Rozada, estimó en julio que "en la primera mitad de este año, la pobreza habría alcanzado al 40/41% de la población urbana", frente al 35,4% que relevó el Indec en el primer semestre del año pasado. 

"Ese promedio se compone de un 33/35% en el primer trimestre y un 45/47% en el segundo trimestre",  dijo el especialista en temas de sociedad y economía en declaraciones radiales.

Por su parte, el Ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, consideró que debido a la caída de la economía, que hasta mayo era del 13,2%; "ha aumentado la pobreza y la desigualdad en Argentina. Es evidente, si bien es difícil hacer encuestas presenciales en este contexto"

El ministro, en declaraciones a la prensa, recordó que en septiembre el Indec va a dar el índice de pobreza al 30 de junio "y sin dudas va a dar un aumento de la pobreza porque subió el costo de los alimentos y porque mucha gente no solo que no tiene changas y tiene menos ingresos, también está endeudada".

Estos índices se construyen a partir de la relación entre los ingresos que obtienen los asalariados para hacer frente al costo que tienen tanto la CBA, que marca el umbral por debajo del cual se cae en la indigencia, y la CBT, que marca el límite inferior de la pobreza.

El índice de Salarios del Indec mostraba un aumento durante el primer semestre del año del 15,8% para los ingresos de los trabajadores privados, del 12,2% para los empleados públicos, y del 13,1% para los "no registrados", variaciones todas estas por debajo del 20,6% de la CBA y del 16,7% de la CBT.

La última medición del Indec, dada a conocer en marzo sobre datos del segundo semestre del 2019, registró que el 35,5% de los habitantes estaban por debajo de la línea de la pobreza, lo que representó un aumento de tres puntos y medio frente al 32% registrado de finales del 2018.

En tanto, el nivel de indigencia medido entre julio y diciembre del año pasado fue de 8%, con un incremento de 1,3 puntos en relación al 6,7% del segundo semestre de 2018.

De esta manera, sobre una población de 47 millones de habitantes, alrededor de 16,4 millones de personas no tuvieron los ingresos suficientes para adquirir la alimentación, servicios básicos e indumentaria, que se requieren para no ubicarse por debajo de la línea de pobreza, entre los cuales, 3,7 millones no tenían dinero ni siquiera para alimentarse todos los días.