La sorpresiva dura derrota del Gobierno en las PASO provocó este lunes euforia entre los inversores tanto en Wall Street, como en la bolsa porteña, donde las acciones argentinas se dispararon hasta 17%, los bonos en dólares treparon hasta 7,3%, y el riesgo país llegó a tocar mínimos en 7 meses, mientras que el dólar blue tuvo la caída diría más pronunciada desde abril pasado.

Con fuerte incremento del volumen operado, los papeles argentinos anotaron alzas generalizadas, que llegaron en algunos momentos del día a superar incluso el 20%. Al cierre de la jornada, sobresalieron los avances de Central Puerto (+17%); Edenor (+13,1%); Pampa Energía (+10,9%); Transportadora de Gas del Sur (+10,4%); Grupo Financiero Galicia (+9,3%); y Banco Macro (+7,9%).

En tanto, el índice accionario S&P Merval de Bolsas y Mercados Argentinos (BYMA) se disparó un 5,5%, a 80.065,91 unidades, aunque llegó a trepar 10,6% tras los primeros negocios. El podio de las subas más relevantes lo integraron las acciones de Central Puerto (+17,2%); Transener (+10,7%); y de Pampa Energía (+9,6%). Los bancos, por su parte, fueron de mayor a menor, y cerraron la jornada con alzas de hasta el 9%.

Respecto a los bonos soberanos en dólares, se vivió la misma tónica alcista, aunque más moderada en comparación a las acciones con subas en promedio del 3%. Se destacaron los globales 2038 y 2035 con subas de hasta 7,3%. seguido por la versión 2035 con legislación local. Ante lo cual, el riesgo país argentino cayó más de 3% a 1.487 unidades, tras tocar mínimos desde inicio de febrero comenzando la jornada (1.448 puntos).

En el mercado, consideran que el recorte en la suba de los precios hacia el final de la rueda podría ser una señal, luego de las subas que viene exhibiendo el mercado las últimas tres semanas, de una inminente corrección. Es que se esperan “mayores novedades del rumbo que tomará el gobierno luego de las elecciones”, señaló Maximiliano Donzelli, Jefe de Research en IOL invertironline.

En el mercado cambiario, por su parte, todas las miradas se posaron sobre el dólar blue, que cayó $4 hasta los $181, aunque los operadores mostraron cierta cautela con este retroceso parcia, dada la endeble situación macro. “Una cosa es el precio del blue de este lunes, que reaccionó a la baja tras el resultado de las PASO, y otra cosa es la situación de fondo. Ese panorama sigue siendo alcista porque el gobierno va a seguir emitiendo, seguirá el déficit fiscal, en un contexto donde no hay crédito externo. Por ahora el oficialismo no quiere hacer un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, con lo cual va a perder reservas. Entonces el mix de perder reservas y emitir, hará que se mantenga la presión al alza”, comentó a Data Clave e analista financiero Salvado Di Stefano.

Contra todos los propósitos, JxC se impuso por una diferencia de 9 puntos a nivel nacional, reflejando una ventaja de casi dos millones de votos, al tiempo que en la Provincia de Buenos Aires, la carrera por la “madre de todas las batallas”, registró un resultado muy diferente al pronosticado por las encuestas: las dos listas de JxC sumaron casi el 38% de los votos superando holgadamente el 33,6% de la oficialista Tolosa Paz, en unas elecciones primarias consideradas un plebiscito de la gestión oficial.

Los comicios, previos a las elecciones legislativas de medio término que se realizarán en noviembre para renovar 127 bancas de la Cámara de Diputados y 24 del Senado, son considerados un termómetro que mide el apoyo al gobierno.

“El resultado fue sorpresivamente satisfactorio para el mercado y por eso vimos una reacción positiva en el precio de los activos argentinos. Esta victoria en las elecciones primarias está lejos de arreglar los problemas en los que está sumergido el país, pero dada su magnitud, brindará un bálsamo de cara a las expectativas futuras. No solamente limitaría la fuerza de la coalición gobernante en el Congreso, sino que abriría la posibilidad de un cambio de administración en el 2023”, comentaron desde Porfolio Personal Inversiones (PPI).

"Al Gobierno le quedan dos meses para inundar de plata la calle y buscar más votos en Provincia (de Buenos Aires) (...) Creo que van a profundizar las políticas en estos dos meses, con más controles", dijo Luis Secco, director de Perspectiv@s Económicas.

Por su parte, Gustavo Ber, economista de Estudio Ver, sostuvo que "existe un riesgo de radicalización tras los resultados, aunque todavía hay que esperar la reacción del oficialismo -ante el mapa electoral-, no sólo en términos económicos sino también político, crucial frente a los dos años por delante", afirmó

"La sorpresa electoral no fueron los votos cosechados por Juntos, sino los votos perdidos por el peronismo", afirmó la consultora Delphos Investment. "Ahora el oficialismo no cuenta con la espalda política lo cual plantea desafíos enormes a futuro como para aplicar un plan económico que permita reconquistar a sus votantes", agregó.

Desde la consultora Econviews, creen que el BCRA y la Secretaría de Comercio “pueden optar por frenar (aún más) las importaciones. Pero eso tendría efectos sobre el nivel de actividad y también sobre la inflación. La frazada corta de siempre", "Otra alternativa es colocar más medidas regulatorias: alguna creatividad sobre el cepo, cambios en las posiciones de dólar financiero u otra ocurrencia del ingenio popular", añadieron.

El director de Anker Latinoamérica, Federico Furiase, señaló que el modelo actual es "flujo dependiente (...) Si la tensión cambiaria escala a un nivel más alto, el Gobierno puede dar señales retóricas de estar avanzando con el Fondo Monetario Internacional o algún otro gesto de moderación ortodoxa".

“La pregunta que nos hacemos hoy es si el Gobierno puede post elecciones hacer un ajuste cambiario, un reacomodamiento cambiario, que sea suave, que vaya a un ritmo de depreciación del peso tal vez algunos meses un poquito por arriba de la inflación como para corregir parte de lo atrasado en estos meses, o no tiene más remedio de hacer un salto cambiario discreto de pocos días y fuerte. Esa es la pregunta. Puede pasar cualquiera de las dos opciones", estimó Martín Rapetti, economista de Equilibra.