Finalmente, la cotización del euro frente al dólar terminó de debilitarse y quedó en nivel de “paridad” (es decir que valen lo mismo uno frente al otro), ante los crecientes temores a que Europa caiga en una recesión por el impacto que generó la guerra en Ucrania en los precios y la disponibilidad de energía, además de otros bienes o servicios. Esto no sucedía desde el 15 de julio de 2002

Este proceso se aceleró hace algunos meses con la invasión rusa a Ucrania. En total, y desde que comenzó el año, la moneda comunitaria acumula una depreciación del 12,05% respecto al billete estadounidense, que con medidas de endurecimiento en su política monetaria generó un nuevo escenario global.

La creciente inflación mundial, que alcanza los niveles más altos en décadas por el aumento de los precios de la energía, y la postura de la Reserva Federal de subir las tasas de interés en Estados Unidos de manera más agresiva que el Banco Central Europeo (BCE) son factores clave para la pérdida del valor del euro.

De hecho, mientras que el BCE anunció que a finales de julio aplicará su primera suba en las tasas de interés desde 2011, con un alza de 25 puntos básicos, la FED ya comenzó la normalización de su política monetaria el pasado mes de marzo, con un incremento de 25 puntos básicos, a la que siguieron alzas de 50 y 75 puntos básicos, respectivamente, en las dos reuniones siguientes.

A esto se suma que en los últimos meses la guerra en Ucrania puso en jaque el acceso de Europa al gas y petróleo rusos, principal fuente de energía de la zona euro, mientras que la empresa rusa Gazprom inició un mantenimiento en su gasoducto Nord Stream 1, con Alemania y otros países europeos, que se extenderá por 10 días.

Si bien se trata de un trabajo que se programó con mucha anticipación, el temor es que, dado el nivel de tensión entre Rusia y Occidente, Gazprom podría aprovechar la oportunidad para simplemente no abrir las válvulas de nuevo y afectar de esta forma el suministro del Viejo Continente.

Por último, el dólar y el oro suelen ser refugio de los ahorristas a nivel mundial. Por tanto, en un momento de tanta incertidumbre económica como el que vive el mundo con la salida de la pandemia y el estallido de la guerra, y mientras en Estados Unidos mantengan una política monetaria tan estricta, los inversores buscarán dichos activos para resguardarse.