Malasia anunció hoy que habilita la compra de carne vacuna procedente de Argentina, toda una señal en medio de las restricciones que impone el Covid 19 y la baja en los precios de las materias primas.

Esta habilitación fue dada a conocer hoy por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, a través de un comunicado, en el que dio cuenta que se llegó a este resultado “luego de años de sostenidas negociaciones” entre las autoridades sanitarias malayas y de Argentina.

“Dado que Malasia es un importador relevante de carne bovina, existen excelentes perspectivas para la producción nacional en este sector”, destacó la cartera que dirige Diego Bastourre.
  

Si bien es cierto que Malasia no es, por tamaño de marcado, China o Japón, lo cierto que es una de las naciones que más ha crecido y de manera sostenida en el sudeste asiático, incorporando hábitos alimenticios, como la carne vacuna, que antes no tenía.

Del lado de Argentina, esto supone una diversificación de mercado en momentos en que los precios están en baja por la menos demanda que generó el Covid-19.

Todo esto se da en momentos en que se espera para los próximos días, que se vuelvan a habilitar dos frigoríficos que habían quedado inhibidos de exportar carne a China, el principal comprador del país, debido a que algunos de sus trabajadores presentaron Covid 19.

Argentina exportó el año pasado carne vacuna y sus subproductos “menudencias y desperdicios, como se conoce en la jerga) por US$ 4.000 millones, un 45% más que en el 2018, una cifra nada despreciable ya que representan el 6% del total exportado, que alcanzó a US$ 65.115 millones.

Desde el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA) destacaron que  las exportaciones argentinas de carne vacuna de mayo resultaron “significativamente superiores”, a las de abril, con un aumento del 25,2%, y también a las de mayo del año pasado, con un alza del 24%.