A los gritos, Mauro Coronel le suplicaba a su madre: “Ma, sácame de aquí, sácame de aquí”. La imploración del muchacho de 22 años fue registrada por la mujer en su teléfono, mientras les rogaba a los agentes de la Comisaría Décima del barrio Autonomía, en Santiago del Estero, que le dejaran ver a su hijo.

Pero no se lo permitieron. Durante las siguientes 48 horas, Laura, la mamá del joven, no supo nada de él. Cómo si hubiera estado desaparecido, en plena democracia. Lo habían arrestado en su casa del barrio Santa Rosa de Lima, de la capital santiagueña, el 30 de abril de 2020.

Cuatro días después estaba muerto. Tras su violento arresto, Mauro murió en el hospital a causa de los golpes y las torturas que sufrió en la comisaría y en otras dependencias policiales durante las 48 horas en las que su familia no supo nada de él. Sin embargo, la autopsia dictaminó que había muerto por neumonía. Tiene una explicación: Mauro estuvo esposado a un poste, en el patio de la comisaría, desnudo, en plena noche, mientras hacía muchísimo frío.

✊🏽 ¡Justicia por Mauro Coronel!

Dos años después del homicidio de Mauro, la investigación judicial no tuvo ningún avance. No hay todavía agentes imputados por el crimen y la desesperanza invade a la familia del joven. Juan Parra, abogado de la familia, explica que se enteraron de casualidad donde estaba Mauro, porque una vecina lo vio cuando lo llevaban al hospital.

De todos modos, no están solos. Amnistía Internacional acompaña a Laura, la mamá de Mauro, y junto a su familia y abogados “exige verdad y justicia por su hijo, víctima de violencia institucional”.

“A mi hijo se lo llevaron de casa con mucha violencia.  Ya en la comisaría lo tenían arrodillado con una bolsa en la cabeza. Él gritaba que lo estaban golpeando, que le dejen de pegar. Lo ataron semidesnudo a un poste en un patio en una noche muy fría. No se merecía esa muerte. Es importante difundir su caso porque en Santiago del Estero lo único que hacen las fuerzas y autoridades es encubrir a los culpables”, señaló Laura.

Mariela Belski, directora ejecutiva de Amnistía Internacional Argentina, sostuvo a su vez: “Ninguna mamá debe pasar por este tormento. Laura merece saber la verdad: qué pasó con Mauro y quienes son los responsables. Las autoridades no están haciendo lo suficiente para garantizar justicia ni asegurar que esto no vuelva a ocurrir. El Estado nos debe a toda la sociedad, y, principalmente a la familia, explicaciones y reparación. Desde Amnistía Internacional no vamos a parar hasta saber toda la verdad”.

Ante la parálisis de la investigación judicial en Santiago del Estero, hace una semanas, con motivo de la visita al país del Subcomité de las Naciones Unidas para la Prevención de la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, Amnistía Internacional “remitió información sobre el caso y solicitó una reunión para los próximos días para dialogar sobre posibles recomendaciones a las autoridades”.

Mientras a la familia de Mauro no se le brinda información y su madre es además víctima de amenazas, en la causa “aún no hay imputados ni se está investigando la responsabilidad de ninguna de las personas que intervinieron en la detención y/o atención de Mauro. A pesar de que hay material probatorio que señala la responsabilidad policial ante posibles hechos de tortura, esto no está siendo investigado por parte de la fiscalía a cargo. La investigación presenta severas irregularidades en materia de investigación diligente, exhaustiva y urgente”.