Un nuevo hecho de inseguridad se cobró esta vez la vida de un joven de 17 años y cientos de personas marcharon en Quilmes pidiendo justicia y seguridad. Lucas Iván Cancino fue asesinado en la localidad de Ezpeleta, partido de Quilmes, cuando se dirigía en bicicleta a la escuela. Fue apuñalado cuando intentaron robarle sus pertenencias.

Por el hecho ya fueron detenidas dos personas mayores de edad con antecedentes penales. El primero de los acusados estuvo detenido por el delito de "robo agravado de vehículo dejado en la vía pública", y quedó en libertad los poco días en el expediente a cargo del Juzgado de Garantías Nº2, del juez Martin Nolfi.

El segundo detenido, señalado como el autor material del crimen, también tenía antecedentes por robo simple en una causa que lleva adelante la misma fiscal que hoy lo acusa por el crimen, Karina Gallo, titular de la UFI Nº4 de Quilmes.

Las dos personas quedaron a disposición de la fiscal Gallo, quien calificó el caso como homicidio en ocasión de robo y en las próximas horas serán indagados, según informaron fuentes judiciales.

El hecho conmocionó a los vecinos de Quilmes y el propio ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, cuestionó el accionar de la Justicia: “Cómo puede ser que una persona que fue detenida por robo con uso de armas fue liberada en cuatro días”, expresó el funcionario bonaerense. “Todos sabemos que se empieza robando algo menor y a veces se termina con una muerte desgraciada, totalmente injustificada”, afirmó Berni.

Y continuó: “Por lo que he hablado con un testigo ni siquiera hubo resistencia. Hubo intención de matar por matar. Y creo que esto es lo que tenemos que discutir en la Argentina, es decir, qué hacemos con estas personas. No podemos seguir tolerando esto, e interpelo a todos aquellos que se niegan a discutir esto”.