Un nuevo caso de abuso de fuerza por parte de la policía causó conmoción en la Ciudad de Buenos Aires. Seis efectivos de la fuerza de seguridad de CABA quedaron detenidos, luego de reconocer haber disparado contra el automóvil en el que se trasladaba un presunto ladrón.

El joven alcanzado por los disparos se llamaba Iván Ezequiel Kresta Orellano y producto de un impacto en el tórax perdió la vida. El hecho ocurrió tras una persecución en el barrio porteño de Parque Chacabuco, este jueves. 

La detención de los agentes porteños la resolvieron el juez en lo Criminal y Correccional N° 20, Hugo Decaria, y el fiscal N° 47 del mismo fuero, Marcelo Solimine, luego de encabezar en el lugar del hecho las diligencias para reconstruir las circunstancias de la muerte de Kresta Orellano (27), el supuesto ladrón que terminó muerto de un tiro en el tórax, pero fue hallado desarmado.

Los seis policías detenidos en una causa caratulada provisoriamente como "homicidio" son tres oficiales, dos oficiales primeros y un oficial mayor de la fuerza de seguridad porteña, la mayoría de la comisaría vecinal 7B de la Policía de la Ciudad.

Todos fueron alojados en la alcaidía de la Superintendencia de Investigaciones de la Policía Federal (PFA) de Villa Lugano, fuerza en la que la Justicia delegó las actuaciones, específicamente a los detectives de la División Homicidios. "Son los seis que admitieron en primera instancia haber disparado contra el vehículo", dijo a Télam una fuente de la investigación.

Si bien todo indica que Kresta Orellano -quien cuenta con antecedentes- venía de cometer un robo en modalidad arrebato, lo que investigan el juez y el fiscal es si hubo exceso o abuso por parte de los efectivos de la Policía de la Ciudad en un procedimiento que culminó con el sospechoso muerto.

Según las fuentes, todo comenzó ayer a las 9 cuando una mujer de 62 años y vecina de la zona caminaba por las calles Cachimayo y Zelarrayán, en el barrio Parque Chacabuco, y un hombre la sorprendió para robarle, la tiró al piso, la arrastró y finalmente huyó con su cartera, en la que llevaba su teléfono celular, su billetera y toda su documentación.

Si bien seis son los detenidos, se les secuestraron las armas a un total de 16 policías porteños que participaron, de algún modo, en la persecución o las posteriores tareas que se realizaron apenas se consumó el hecho. El juez aguarda los peritajes a esas armas para intentar identificar cuál de los policías fue el que efectuó el disparo que mató al joven.