El exministro de Agroindustria de Cambiemos y productor agropecuario, Luis Etchevehere, rechazó las retenciones que impuso el Gobierno nacional y advirtió que "el campo va a dar pelea".

El otrora de confianza de Mauricio Macri rechazó que Alberto Fernández, por un decreto nacional, elevara del 31 al 33% las retenciones para productos como la harina y el aceite de soja, entre otros. Con ese excedente conformarán un fideicomiso para intentar bajar el precio del trigo.

El expresidente de la Sociedad Rural aseguró que pese a que "nadie más que el Estado puede resolver la inflación", la actual administración hace que "dejen de entrar dólares o que entren menos de los que pueden entrar", dijo en CNN Radio.

"Por eso, la gente del campo dice: ¡Basta! porque estamos como estamos por la ineficiencia de quienes gobiernan. Lo que plantearon fracasó", sostuvo el de Cambiemos.

Etchevehere consideró que los problemas de Argentina se comenzaron a desarrollar "desde 2008" y que en la actualidad, los países competidores están mejorando su producción y, por consecuencia, sus números de consumo interno. "No tienen retenciones, no tienen inflación y la gente tiene ingresos de acuerdo a sus necesidades para cumplir con su vida", planteó.

A esta situación económica, indicó, se le suma los avances y retrocesos en la administración del presidente Alberto Fernández: "A juzgar por cómo viene este Gobierno, que dice una cosa y hace otra, el sector del campo puede esperar cualquier cosa. No tienen palabra. Anuncian algo y mañana hacen lo contrario o, peor, la mitad del gobierno critica lo que hacen sus compañeros".

Por tal motivo, alertó sobre la peligrosidad del actual panorama: "Es difícil decir cómo va a terminar esto. Lo que estoy seguro es que la gente la va a pelear. No por el 2%, sino por todo".

"Estamos en un momento crítico del país por lo desorganizado que está el gobierno. Es un llamado de atención que debemos tener presentes, porque en definitiva mintieron en la campaña, prometieron que iban a hacer otra cosa. Van dos años y no han hecho nada más que pelearse entre ellos", continuó.

Y por último, señaló: "Mientras tanto, el país es un desquicio. Ese microclima que hay en Capital Federal y alrededores, por acción del gobierno, está desacoplado del interior del país productivo".