Este martes, el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación hizo una presentación ante las autoridades judiciales de La Rioja, en una de las causas seguidas contra Delfina Zarranz, mamá de Arcoiris, por presunta "desobediencia a la autoridad e impedimento de contacto de hijos menores con sus padres". 

En el texto, el ministerio le requirió a la titular del Juzgado de Instrucción de Violencia de Género y Protección Integral Nro. 2 que se respeten las obligaciones internacionales comprometidas por el Estado argentino en materia de derechos humanos y que las actuaciones que se realicen en el marco de la causa incorporen la perspectiva de género.

Asimismo, se contactó con la periodista Manuela Calvo para acompañarla a través de las intervenciones del programa Acercar Derechos y solicitó al Juzgado de manera formal tener acceso al expediente a los fines de evaluar futuras intervenciones en el marco de sus competencias.

El pasado domingo 5 de junio, la justicia riojana ordenó el allanamiento de la casa de Calvo y durante el operativo le secuestraron todos sus elementos de trabajo para "impedir que se refiera al caso Arcoíris", donde se denuncia el abuso sexual a una menor de 6 años por parte de su abuelo paterno.

Arcoíris es el nombre ficticio de una menor de 6 años que a los 2 años de edad manifestó que era abusada sexualmente por su abuelo paterno, lo que motivó a su madre a hacer la denuncia. En diferentes oportunidades, la mujer solicitó un régimen especial porque el juzgado obligó a la menor a asistir a la casa de su padre, donde tiene contacto con el presunto abusador y manifestó que "tiene miedo".

Incluso en su última visita al domicilio paterno, la niña manifestó haber sido nuevamente agredida, lo que fue constatado por la policía técnica judicial de esa provincia.

Actualmente, la madre de Arcoíris, por intentar resguardar a la menor, enfrenta una causa por desobediencia a la autoridad, mismo delito impuesto a Calvo y lo que motivó el allanamiento en su domicilio.