Los dirigentes que tienen años de reuniones y plenarios en los comité suelen decir orgullosamente que “donde hay dos radicales, hay una interna”, en alusión a las recurrentes discusiones que tiene ese partido para encontrar una síntesis de conducción. Esa frase refleja hoy más que nunca la situación de una Unión Cívica Radical que se divide a un mes del Gobierno de Javier Milei.

El partido correligionario navega por tiempos de inestabilidad. Hace ocho años que no tiene un candidato a Presidente fuerte y sigue siendo el furgón de cola de otros actores de la política nacional. El último candidato puro fue Ricardo Alfonsín en 2011, cosechando apenas el 11% de los votos ante una Cristina Kirchner que sacó más del 54%. En ese año, Hermes Binner armó una coalición con otros espacios y sacó casi el 17%.

El protagonismo del radicalismo se perdió desde la llegada de Mauricio Macri al poder. Desde ese entonces, el partido centenario no logró tener candidatos a presidente ni vice en 2015, 2019 y 2023. En el último caso, la apuesta de un sector mayoritario de la UCR fue con Gerardo Morales vicepresidente de Horacio Rodríguez Larreta, pero la fórmula mordió el polvo ante Patricia Bullrich.

La reciente victoria de Milei hizo mella y el radicalismo ahora transita por un gran debate interno para definir qué rol tomar en esta nueva época en la que el ajuste fiscal y las políticas económicas de “shock” son una norma y no una excepción a la regla.

La discusión latente está en la Cámara de Diputados, donde en estos momentos se está discutiendo el proyecto de ley ómnibus que envió el Gobierno. El bloque de la UCR cuenta con 34 escaños y su referente, en principio, es Rodrigo de Loredo. La duda se debe a que hay un grupo de legisladores que no lo ven como un líder en la Cámara.

“Está jugando raro, todos vemos que está jugando medio torcido”, le dijo un importante dirigente a este medio sobre los últimos movimientos de De Loredo. En una entrevista radial, el diputado cordobés aseguró que su bloque no va a impulsar ninguna estrategia que apunte a rechazar ni el DNU ni la ley ómnibus que propuso Milei.

Fuentes radicales le aseguraron a Data Clave que hay un grupo de diputados que hoy estarían más identificados con la estrategia que conduce Miguel Ángel Pichetto que con la pasividad de De Loredo. Según dicen, esa pasividad es beneficiosa para un Gobierno que tiene los números muy justos para que salga el proyecto.

Un dirigente de larga experiencia en el radicalismo sostiene que hay más de diez diputados que están dispuestos a votar en contra de la ley ómnibus y del DNU. Son los mismos que hace pocos días le pidieron a Martín Menem que no dilate la conformación de la Comisión Bicameral de Trámite Legislativo para analizar el contenido del Decreto. Muchos de ellos hoy son conducidos por el neurocientífico Facundo Manes.

Ese síntoma también se traslada a la provincia de Buenos Aires. “Estamos divididos también. (Maximiliano) Abad ya no controla todo como antes”, le dijeron a Data Clave. Esto va en línea con el último reclamo que presentó el Foro de Intendentes Radicales contra Milei por el fuerte aumento de los medicamentos.

El espacio que preside el jefe comunal de Rauch, Maximiliano Suescun, emitió un comunicado en el que muestra diferencias con esta decisión. Vale recordar que Milei, en su DNU, no prorrogó los acuerdos que regulaban su valor hasta el diciembre de 2023.

El Centro de Profesionales Farmacéuticos Argentinos (Ceprofar) calcula que los precios de los medicamentos más requeridos en el país subieron un 319% entre enero y diciembre de 2023, por encima de los 100 puntos de la inflación general.

“Es de suma urgencia que el Gobierno nacional promueva medidas tendientes a lograr regular el precio de un bien que resulta de carácter imprescindible para todos los argentinos, y que entendemos debería declarase como bien esencial”, plantean. Esto también fue expresado en la Legislatura bonaerense por el bloque Acuerdo Cívico UCR-GEN que reúne a los diputados Claudio Frangul, Matías Civale, Nazarena Mesias, Natalia Dziakowski, Viviana Dirolli y Julio Pasqualin.

X de Natalia Dziakowski

“No puede tolerarse que mantener una medicación se convierta en algo inalcanzable. La liberación de precios del sector es el tipo de decisiones que no puede tomarse sin medidas de protección social en pleno deterioro del poder adquisitivo de los ingresos de las familias”, manifestaron.

El primero que escuchó este reclamo y lo capitalizó políticamente es el gobernador bonaerense Axel Kicillof. El jueves sobre el cierre del día mantuvo un encuentro con el sector farmacéutico y aseguró que “es otro de los grandes perjudicados por las medidas que intenta impulsar el Gobierno Nacional”. 

X de Axel Kicillof

“Las políticas que se intentan promover ya fracasaron en otros países, generando un aumento de los precios de los medicamentos y una mayor concentración en beneficio de los grupos más poderosos. Tenemos que cuidar el derecho a la salud de todos y todas. Por eso es fundamental que en las farmacias haya especialistas que puedan garantizar los cuidados y la seguridad de los medicamentos”, agregó.

En los comité siguen esperando que haya una voz que los conduzca estratégicamente. Seguramente en el corto plazo haya una reunión del Comité Nacional, encabezada por su presidente Martín Lousteau, para ordenar al partido y limar asperezas. Hasta ahora lo único que hay son expresiones individuales que no hacen al colectivo. Que se rompa, pero que no se doble.