Miles de personas participaron del banderazo organizado para protestar en contra del gobierno de Alberto Fernández, en el marco de la conmemoración del Día de la Independencia. La protesta, que se realizó sin mayores incidentes, generó repercusiones en el sector político.

En concreto, el presidente del bloque de diputados nacionales del Frente de Todos (FdT), Germán Martínez, quien calificó de "violentos, odiadores, desestabilizadores, destituyentes y golpistas" a los manifestantes.

"Lo que se vio ayer en Buenos Aires contra Alberto Fernández y el Frente de Todos es exactamente igual a lo que generaban años atrás contra Cristina Kirchner y el Frente para la Victoria. Son violentos. Odiadores. Desestabilizadores. Destituyentes. Golpistas. Mi repudio absoluto", expresó Martínez por la guillotina que se colocó frente a la Casa Rosada.

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Por su parte, el líder social Juan Grabois opinó sobre la movilización y dijo: "Con antorchas y guillotinas la seccional Argentina del ku klux klan salió de paseo con el apoyo de los cambiemitas y ciertos medios para decir muy republicanamente que nos quieren muertos, presos o exiliados. Que linda gente".

En tanto, el embajador argentino en España, Ricardo Alfonsín, sostuvo también que la marcha de "republicana y democrática no tuvo nada, y aunque parezca mentira, hubo políticos que precisamente en nombre de la democracia y la república, asistieron o expresaron su apoyo".