La Cámara de Diputados convocó a una sesión especial el martes 28, a pedido del bloque del Frente de Todos, justo un día antes de la visita de Alberto Fernández el 1 de marzo.

El objetivo es debatir el proyecto de moratoria previsional que permitirá resolver la situación de unos 800 mil personas en edad de jubilarse que no cuentan con el total de aportes realizados. La iniciativa del kirchnerismo en el Senado ya fue puesta en una sesión de diciembre a donde la oposición no fue y se cayó por falta de quórum.

El Frente de Todos intentó en diciembre realizar una sesión con dicha iniciativa pero fracasó en la recolección de voluntades y el debate se cayó por falta de quórum. Ahora, podría contar con la ayuda de distintos bloques de la oposición. 

A los 118 del bloque FdT, hay que sumar 4 diputados del Frente de Izquierda que confirmaron presencia y 4 del bloque Provincias Unidas. Hay 3 bancas más desde el interbloque Federal, la bonaerense Graciela Camaño, los diputados del socialismo Enrique Estévez y Monica Fein. El otro bonaerense que podría sumarse es Alejandro “Topo” Rodriguez. Dada esta cuenta, hay proyectados 131 diputados, dos más de los 129 mínimos para habilitar una sesión. “Depende de ellos, si hay 118 diputados oficialistas sentados, habrá quórum”, advirtieron fuentes parlamentarias.

Esta suma no permite ninguna filtración en el oficialismo, todos deberán estar sentados en sus bancas. La expectativa pasará por ver la unidad expresada en el FdT luego de la ruptura de cuatro senadores peronistas en el bloque del Senado. Por ahora, bloques federales descartan negociaciones parecidas en Diputados.

El otro punto del temario es un programa de digitalización de las historias clínicas para todo el país. Dicho texto fue trabajado por la comisión de Salud que preside Monica Fein, un gesto para asegurar las bancas claves que confirmen el quórum.

El oficialismo se juega una última ficha, y por partida doble, para terminar esta vez un periodo extraordinario con alguna ley sancionada.