El Senado tuvo su primera sesión convocada por la vicepresidenta de la nación, Victoria Villarruel, para la designación de autoridades de la Cámara y la conformación de las comisiones.

Bartolomé Abdala, del bloque oficialista por la provincia de San Luis fue aprobado con 39 votos positivos y con la abstención del peronismo. La vicepresidencia primera que corresponde a Unión por la Patria quedó reservada para una designación y el siguiente puesto de vicepresidenta segunda fue para la radical Carolina Losada. La Libertad Avanza conformó una “nueva mayoría” con bloques de Juntos por el Cambio y provinciales para arrebatarle puestos claves entre las autoridades y lugares en las comisiones. 

Pero también, con este mismo número, se designaron todas las secretarias parlamentarias y administrativas. La secretaria parlamentaria fue para Agustín Giustiniani, cercano al PRO, y la prosecretaría para Dolores Martínez, que hasta el periodo anterior fue diputada del radicalismo. El peronismo se quedó afuera del reparto.

Al inicio de la sesión, el bloque Unión por la Patria alertó sobre una posible “ilegalidad” reglamentaria de la sesión. El titular del bloque, José Mayans, planteó la inconstitucionalidad de la convocatoria y se quejó de la actitud de Javier Milei de no hablar en la Asamblea Legislativa.

El peronismo denunció que “vienen con una nueva mayoría a desconocer lo que votó la gente con una sesión ilegal tratando de determinar el trabajo en el parlamento sin la primera minoría”. En Unión por la Patria advirtieron que el número que reunió LLA junto a JxC y otros bloques para el reparto de los puestos en las comisiones avanzó sobre el número que tiene UxP en el Senado.

“Hay improvisación y un desconcierto total, ojalá tengamos debate para poder comparar políticas públicas y no terminar como el gobierno de Macri con el 100% de compromisos de deuda y en default”, se quejó Mayans y sentenció: “no empiezan bien la gestión”.

En relación a la supuesta ilegalidad de la sesión, desde el PRO apoyaron la posición de LLA. “Para agregar a lo que ya marcó la Corte, nuestro reglamento dice en el artículo 95º que durante el receso podemos reunirnos y estudiar asuntos y  dictaminar sobre aquellos que hagan a cuestiones internas del Senado”, consideró Guadalupe Tagliaferri, senadora del PRO.

El flamante titular de la bancada radical, Eduardo Vischi sostuvo que la gente no quiere verlos discutir cuestiones reglamentarias y ponerse a trabajar. “Tenemos acefalía y no podemos esperar al 24 de febrero para resolverlo”, afirmó. Además, consideró como “muy importante resolver la composición de las comisiones”.

Por su parte, la senadora Juliana Di Tullio disparó munición gruesa contra sus pares presidentes de bloque. “La reunión de Labor fue una reunión de amigos, aunque no haya terminado de manera amistosa”, ironizó.

Y detalló: “Ayer en Labor pasó algo que no presencié en mi vida, que lo desmienta el que lo dijo, delante suyo presidenta y adelante de todos los presidentes de los bloques se negoció despachos y cargos por quórum para este sesión y nadie dijo nada, delante de todos los presidentes de bloque y nadie dijo nada”.

Acto seguido, agregó que los denunciantes “dijeron que los estaban extorsionando” pidiendo “dinero para darles los despachos”, lo que calificó como “un escándalo del que nadie se hace cargo”.