La Cámara de Diputados se encaminaba a otra semana tranquila de sesión con proyectos de acuerdo. En el mismo día, tenía planificado la preparatoria para designar un año más las autoridades actuales, incluida la presidenta Cecilia Moreau. Todo cambió el miércoles por la tarde cuando nuevamente apareció la disputa por el Consejo de la Magistratura, algo tan caro a los sentimientos políticos y alejado del día a día de la sociedad. 

Moreau en su calidad de titular de la Cámara baja apeló un fallo que ponía en suspenso a las designaciones de los diputados en el Consejo y en el mismo acto postergaba la nómina para integrar dicho cuerpo hasta tanto estuviera definida la cuestión de fondo. La resolución incluía a los legisladores oficialista y también a los opositores. La mecha se encendió. JxC realizó una reunión de bloque al calor de la sorpresiva decisión y resolvió no dar quórum en la sesión preparatoria.

La postura arrastró al interbloque Federal que no tenía ningún cargo a su nombre y por ende, llamó a los dos bloques mayoritarios a ponerse de acuerdo. Luego, la sesión del escándalo, los gritos, los insultos, los golpes en las bancas y la ruptura total del orden que derivó en una segunda sesión fallida en menos de dos horas.

La Corte: la causa del desencuentro según el FdT

El clima caliente en Diputados se sentía en los pasillos durante las horas previas y durante las sesiones de este jueves. “La Corte se metió en un quilombo y no sabe cómo salir”, dijo a la pasada un importante diputado del bloque oficialista para resumir lo que está pasando con el Consejo de la Magistratura. El Frente de Todos entiende que la decisión de restituir una ley de 1997, donde la realidad política y de los bloques parlamentarios era otra, obtura la chance de entendimiento sobre los que deben ocupar lugares en la Magistratura. Además, la decisión del supremo tribunal de impugnar a Martín Doñate en el Senado generó criterios espejados con Diputados. Un callejón al que no se le ve la luz de salida. 

“El problema que tiene la Corte es que lo que le sirve en Diputados no le sirve en Senado”, definió ofuscado el mismo legislador oficialista con silla en la mesa de decisiones. Esto es así porque la Justicia entendió que la división del Frente de Todos en el Senado fue una maniobra pero en Diputados Juntos por el Cambio está dividido en bloques y cosecha por dos. “Se creen que los diputados somos todos pelotudos”, agregó en medio del tenso clima. 

La chispa que detonó meses de tranquilidad en Diputados y la estrategia para retomar el diálogo

“Juntos por el Cambio negocia como interbloque por los lugares en las comisiones y después para el Consejo pide bancas contando por bloque”, se quejan desde el FdT.

Las posturas son insalvables en esto. En el interbloque mayoritario de la oposición entienden que la jugada de Moreau es ilegal y hasta merece una consideración penal por posible abuso de poder de parte de la presidencia de la Cámara de Diputados. “Este es un hecho de extrema gravedad. La presidenta de la Cámara decidió dejar de defender los intereses de todos los diputados para sumarse a la estrategia de Cristina Kirchner de paralizar el Consejo de la Magistratura y atropellar la Justicia”, dijo Mario Negri (UCR) en la previa del dantesco jueves de super acción en Diputados..

Y ahora ¿qué?

Diputados venía con un ritmo y un cronograma en donde pensaba realizar dos sesiones más. La frustrada de esta semana para sancionar los proyectos de salud y de creación de universidades y una sesión más el 15 para intentar aprobar la moratoria previsional que el kirchnerismo impulsó desde el Senado y un proyecto contra el lavado de activos que interesa al ministerio de Economía.

¿Cómo piensa el oficialismo pasar este momento y retomar la agenda? Fuentes parlamentarias del Frente de Todos aclararon a Data Clave que posterior a la disputa en el recinto “no hubo reunión” y que la decisión era “esperar un toquecito a que se calmen las aguas”. En el oficialismo, aseguraron que el diálogo se va a retomar una vez pasada la tormenta “para armar una agenda pronto”.

En Juntos por el Cambio fueron tajantes, “no hay nada de chances” para volver a retomar una sesión preparatoria antes del 10 de diciembre, fecha donde termina el tiempo reglamentario para votar autoridades. De esta manera, Cecilia Moreau y el resto de los vicepresidentes continuarán en sus cargos de manera automática.