Sin acuerdo. Una vez más, la Corte Suprema de Justicia postergó la definición sobre los traslados de los jueces Leopoldo Bruglia, Pablo Bertuzzi y Germán Castelli. En una reunión virtual, los cinco magistrados supremos no lograron llegar a un consenso sobre el caso y mantienen sus escritos en reserva.

Para llegar a un fallo que zanje aunque sea una parte del conflicto, se necesitan sí o sí tres votos en la misma dirección. Si bien en los temas importantes o de relevancia la Corte siempre intentaba salir de forma unánime, la costumbre se rompió con la llegada de Carlos Rosenkrantz a la presidencia.

Dentro del Palacio de Tribunales se manejan con hermetismo. Los alcances de la decisión son uno de los puntos a discutir. ¿Tiene que ser un fallo solamente abocado a la situación de los tres jueces o estará volcada a definir sobre el tema traslados en general? ¿Puede salir la Corte con una resolución en la que nadie salga como ganador? El único que ya adelantó de manera disimulada su postura fue Rosenkrantz mientras que los otros cuatro integrantes navegan aún entre las distintas variables.

¿Cuándo podría definirse el tema? El jueves hay una nueva reunión y la idea es que el fallo salga lo más pronto posible. El diálogo entre magistrados se mantiene de manera constante justamente para agilizar una definición que no resulta nada fácil. Desde el Gobierno se mezclan distintas sensaciones: expectativa por lo que puede suceder y cierta alerta por no tener ni una pista de lo que se pueda llegar a definir.

Los traslados siempre fueron un conflicto dentro del Poder Judicial y más desde la creación del Consejo de la Magistratura. En estos 20 años se realizaron alrededor de 65 traslados de jueces aunque un tercio de ellos ocurrió durante el gobierno de Mauricio Macri

"El nombramiento de un magistrado por el Poder Ejecutivo Nacional es para un cargo específico y no consiste en la atribución genérica del carácter de 'Juez' sin adscripción concreta a un cargo". El fragmento le pertenece a un juez que estuvo 31 años dentro de la Corte Suprema, Enrique Petracchi, y que se manifestó en contra de los traslados en el caso "Del Valle Puppo" de 1996. Jorge Del Valle Puppo era un magistrado que había obtenido el okey del Senado para integrar la Cámara del Trabajo. Sin embargo, nunca juró y el Ejecutivo lo trasladó por decreto a la Cámara Civil y Comercial Federal.

Esa decisión provocó una "rebelión" porque sus nuevos compañeros no lo aceptaron. El caso, por supuesto, terminó en la Corte, que por entonces tenía la ya famosa "mayoría automática menemista". En esa época, el Ejecutivo se jactaba de la posibilidad de utilizar el mecanismo de traslados todas las veces que quisiera.

Con la llegada del Consejo de la Magistratura, se creó un reglamento para los traslados, pero que permitió que se hagan de forma bastante laxa. En 2018, cuando la Corte trató el tema mediante una acordada (es decir, un documento administrativo) las interpretaciones entre juristas fueron dispares. Ahora, el Máximo Tribunal tiene la posibilidad de definir bajo qué condiciones pueden darse esos traslados, si es necesario siempre el okey del Senado o si hay excepciones muy concretas que justifiquen un traslado puntual.

El abogado y especialista en Derecho Constitucional, Andrés Gil Domínguez, vaticinó: "La mayoría de la Corte resolverá que esta clase de traslado si no cuenta con el acuerdo del Senado es transitorio hasta tanto se cubra el cargo mediante el procedimiento del art. 99.4 de la CA y si cuenta con el acuerdo del Senado es definitivo".

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