El Presupuesto General de la Administración Nacional para el ejercicio fiscal del año 2021 es el tema del momento en el Poder Legislativo. Luego de la media sanción en Diputados, el Senado, con la Vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner a la cabeza, deberá tratarlo en su próximo encuentro mixto. 

El proyecto de ley que envió el ministro de Economía Martín Guzmán sufrió modificaciones que, según explican en el Congreso, son fruto de una incansable negociación política. Mientras estaba en ejercicio Emilio Monzó, máxima autoridad de la Cámara baja durante el gobierno macrista, enunció una recordada frase: "Reivindico la rosca".

"En base a la rosca se genera la confianza para lograr los acuerdos", dijo Monzó, desde su estrado y con la voz casi quebrada, en diciembre de 2018, en ocasión de ser reelecto como Presidente del órgano legislativo. Un sucesor lógico en el cargo parece ser Sergio Massa, quien en las últimas semanas se dedicó a "rosquear" para conseguir los consensos necesarios para la sanción de la llamada "Ley de Leyes"

En el medio de una serie de rumores y trascendidos que dan cuenta de pujas internas en el corazón de la coalición gobernante, el Presidente de Diputados se ocupó de tender puentes con el Poder Ejecutivo, con el Senado y con los principales voceros de la oposición, en pos de asegurar la sanción definitiva del Presupuesto. Lista de nombres variados para darle forma a un proyecto que tenía como principal ambición conformar a todos. O a casi todos

Entre los cambios propuestos por Massa y conversados con los distintos sectores del oficialismo se destacan algunos que generan ciertos cuestionamientos. Por ejemplo, se establece una equidad tributaria para la producción e importación de tecnología. Esto significa que, en caso de aprobarse, tendría una mayor carga impositiva la compra de artefactos electrónicos. Una medida de este calibre, que suele resultar antipática para los sectores de clase media, busca aumentar la recaudación y fomentar el trabajo nacional al mismo tiempo.

Desde Diputados argumentan que el polémico agregado en el proyecto surgió a partir de un pedido específico de Gustavo Melella, Gobernador de Tierra del Fuego. La provincia más austral de Argentina necesita reactivar su industria principal después de sucesivas crisis. La decisión de Macri de liberar importaciones se tradujo en un duro golpe para un sector que quedó prácticamente desmantelado y ahora pretende recuperarse.

El Artículo 95 es otro de los que que sufrió modificaciones de última hora. Allí se fijan las Tasas Nacionales para la fiscalización del transporte de pasajeros y de carga, que quedarán atadas a una suma de pesos anual equivalente a una escala que oscilará entre 20 y 50 litros de gasoil. Fue el referente sindical Hugo Moyano, histórico líder de Camioneros, quien intercedió personalmente para terminar de cerrar estos números. También se agregaría una contribución obligatoria del 0,5% sobre el seguro automotor

Además, se plantea una reducción del Impuesto sobre los Créditos y Débitos a aquellas empresas que tengan una participación societaria del Estado Nacional igual o superior al 80%, entre las que se destaca, por supuesto, Aerolíneas Argentinas, que pasará a pagar un dos y medio por mil. Cuentan que la negociación con los representantes de La Cámpora vinculados a la empresa aérea de bandera fue fundamental en esta definición. 

Para Agua y Saneamiento Sociedad Anónima (AYSA) también habría una rebaja en los impuestos, que fue solicitada desde la entidad estatal que tiene como titular a Malena Galmarini. Explican que la situación deficitaria y de altas deudas que dejó como herencia el macrismo limita la capacidad de realizar obras y asumen el compromiso de concretar más de 1200 kilómetros de red de cañerías a partir de la reducción impositiva. 

Después de interminables idas y vueltas con los líderes del rubro, se establece "en todo el territorio de la Nación un impuesto que grave las apuestas y/o juegos de azar efectuados en el país a través de cualquier tipo de plataforma digital". La decisión no se logró sin la natural resistencia de los empresarios del sector y que fue trabajada en conjunto con la Comisión de Presupuesto presidida por Carlos Heller.

Otro de los que tuvo una constante participación en el armado del proyecto fue el Jefe del Bloque del Frente de Todos, Máximo Kirchner. De buena relación con Massa durante todo el 2020, el Diputado por la Provincia de Buenos Aires funcionó también como el necesario nexo con el Instituto Patria, a partir de su rol de obvio representante del kirchnerismo más puro. El ministro de Economía Martín Guzmán, autor intelectual del proyecto original, también fue consultado en cada cambio.