El jefe de gabinete del gobierno nacional, Agustín Rossi, luego de dar un discurso donde abordó la economía, se refirió al atentado a la vicepresidenta Cristina Kirchner y apuntó contra los discursos de odio.

A la hora de las preguntas, los diputados de la oposición tuvieron dos ejes centrales: La seguridad en Rosario y la situación económica. Uno de los primeros en hacerlo fue Enrique Estevez (Socialismo Santa Fe) que cuestionó sobre el narcotráfico. “¿cuál es el plan que el Gobierno nacional, a través de sus ministerios, tiene para sofocar el nivel de violencia que hay en nuestra sociedad?”, señaló.

Al momento de responder, Rossi aseguró que “el tema de la seguridad en mi agenda política personal no es una cosa que aparece ahora que soy jefe de Gabinete, cuando fui candidato a gobernador planteé el crecimiento de lo que significaba la cantidad de delitos que pasaban en Rosario y fue subestimado”, dijo. 

“Todos queremos que Rosario vuelva a recuperar niveles de tranquilidad”, afirmó y sentenció: “los primeros que queremos que Rosario vuelva a tener niveles bajos de inseguridad somos los rosarinos. Cuando se apaga la luz, se van los medios y los que hacen visitas, los que quedamos viviendo ahí somos los rosarinos”.

El funcionario relató que cuando asumió en su cargo se reunió con el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, y con el intendente de Rosario, Pablo Javkin, para “planificar una serie de acciones”.

El libtertario José Luis Espert lo cruzó con dureza en uno de los discursos más encendidos. “No se como le da la cara, una vergüenza, todos los números tirados de los pelos y nos viene a cagar a pedos por poco”, espetó el diputado.

“Yo lo escuché atentamente y usted ni siquiera tiene la educación de mirarme”, siguió y se refirió directo: “no te hagas el canchero”. Uno de los momentos más calientes.

En el tiempo de Juntos por el Cambio, Ricardo López Murphy, cuestionó el sistema cambiario y remarcó que el problema no se resuelve con canje de deudas sino eliminando la brecha entre los tipos de monedas. Por su parte, Alejandro Cacace, apuntó también al canje de bonos de entes públicos y marcó la contradicción de haber comprado deuda hace unas semanas y vender activos días más tarde. “¿Cuál es la urgencia por la que lo hicieron por decreto con el Congreso activo”, preguntó.

El titular de la bancada radical, Mario Negri, repasó precios del 2019 y los comparó con los de la actualidad para cuestionar el rumbo económico contra la inflación. “Están con respirador, han jugado con fuego y eso no es culpa de la oposición”, remarcó. Fueron varios los legisladores de los bloques opositores que cuestionaron la ausencia de la palabra “inflación” en el discurso del jefe de ministros.

Para cerrar, el titular del PRO, Cristian Ritondo, sin hacer preguntas realizó duras críticas contra el gobierno y las internas en el oficialismo. “No tienen sensibilidad social”, apuntó y agregó: “Si este gobierno tiene compromiso contra el narcotráfico lo disimulan bárbaro, crece en todos lados, no solo en Rosario”, agregó Ritondo.

El referente de la bancada amarilla ironizó que “no le dan las cuentas” para que el Frente de Todos renueve mandato a partir de diciembre y anticipó que en las urnas se va a retomar el camino que se interrumpió en las elecciones de 2019.

La respuesta a JxC llegó luego de un cuarto intermedio breve. Rossi contragolpeó con la gestión Cambiemos y señaló que “tuvieron inflación sin pandemia, sin guerra y sin sequía”. 

“Los DNU tiene intención de intervenir en el mercado financiero, el Contado con Liqui y el MEP, acortar la brecha para atacar la inflación. Lo que hacemos es aumentar la oferta para que esos dólares bajen. Los veo muy confiados que van a ganar las elecciones, quizás los tengan que usar ustedes, vamos a tener mejor cosecha pero no vamos a tener resuelta la inflación”, respondió en extenso sobre el canje de bonos. Sobre el FGS, el jefe de gabinete recordó una frase de Macri pidiendo privatizar los fondos jubilatorios y pidió a la oposición “no volver a recorrer ese camino”.

En cuanto a las reservas, aseguró que el año que viene el país va a estar mejor por el saldo positivo que generará una cosecha sin sequía y la creciente generación en materia de energía. Sin embargo, estimó que el problema de la inflación “no va a estar resuelto”.

En cuanto a la inseguridad, coincidió en la gravedad de la situación en Rosario “cualquier cosa que digamos es quedarnos cortos, lo único que puedo decir es que todos coinciden que estos días posteriores a las últimas medidas, se respira un poco más”, y le aclaró a la bancada opositora que sigue viviendo en Rosario al igual que su mujer y sus hijos.