El presidente Alberto Fernández dará a conocer este lunes una renovación parcial de su gabinete. Elizabeth Gómez Alcorta, Gabriel Moroni y Juanchi Zabaleta dejarán oficialmente sus lugares al frente de los ministerios de la Mujer, Trabajo y Desarrollo Social, respectivamente, para oxigenar un gobierno que atraviesa una crisis política.

Claro, cada uno lo hará con sus motivos. Lo cierto es que la salida de Gómez Alcorta, a partir de lo que fue el desalojo de los mapuches en Villa Mascardi, donde según manifestó "se ha traspuesto un límite" por violar los derechos humanos a las mujeres detenidas, aceleró la salida de los otros dos funcionarios nacionales.

De hecho, la renuncia de Zabaleta estaba prevista para noviembre, como ya había adelantado Data Clave. Sin embargo, tras el golpe interno de la salida de Gómez Alcorta, desde el gobierno se tomó la decisión de mostrar los "cambios" como una renovación. Como se sabe, el dirigente volverá a Hurlingham con el fin de pelear por la intendencia local en 2023 y no perder más terreno ante La Cámpora.

Lo de Moroni responde más según dieron a entender a cuestiones personales. Sin embargo, el ahora exfuncionario era uno de los ministros más cuestionados desde el kirchnerismo. Sobre todo desde La Cámpora.

A la espera de la confirmación de los nombres que sucederán a los ministros salientes, lo que queda al descubierto es la poca consistencia de un gabinete que empezó con 21 ministros de los cuales hoy solo son cinco los que siguen al frente de las carteras para las que fueron seleccionados originalmente.

La lista de los sobrevivientes está integrada por Eduardo 'Wado' De Pedro (Interior), Tristán Bauer (Cultura), Gabriel Katopodis (Obras Públicas), Matías Lammens (Turismo) y Juan Cabandié (Ambiente). Este último, sin dudas, el más cuestionado de los que todavía continúan producto de los incendios en el Delta.

A ellos podría sumarse un sexto sobreviviente: Santiago Cafiero. Con una particularidad. El actual canciller comenzó siendo jefe de Gabinete por lo que, en concreto, no mantuvo su cargo original.

De esta manera, solo el 23 por ciento de los originales pudieron conservar sus puestos sin modificaciones. Mientras que el 77 por ciento restante tuvo una sola renovación. Con un detalle más fino. Tras la salida del exministro Martín Guzmán, y la corta estadía de Silvina Batakis, se nombró a Sergio Massa como superministro, tomando el control de Economía, Producción y Agricultura, por lo que estos dos últimos también tuvieron una renovación más del promedio.

Cabe recordar que la primera dimisión del gabinete se dio en noviembre de 2020, a solo once meses de asumir, cuando la entonces ministra de Desarrollo Territorial y Hábitat, María Eugenia Bielsa, dejó su cargo y fue reemplazada por el intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi.

A 14 meses de lo que será un cambio de mandato, Alberto Fernández intentará con estos nuevos cambios dar un giro a un gobierno que se encuentra atado a todo lo que pueda lograrse desde  en términos económicos. Por lo que, para saber los resultados, habrá que esperar.