Las palabras de la ministra Sivina Batakis parecen ir en contra a lo que dijo el martes, cuando anticipó que el plan deberá someterse a “ajustes necesarios” en las metas del segundo semestre, por la guerra en Ucrania y que, en ese marco, buscará “modificaciones”.

El viernes Argentina le pagará al Fondo US$ 1.300 millones con dinero que el propio organismo le otorgó, a cambio de reducir este año a 2,5 puntos del PBI el déficit fiscal, que el año pasado fue de 3,1%, limitar a 1% la asistencia del Banco Central al Tesoro, y hacerse de reservas.

Fuentes oficiales explicaron a Data Clave que “fue una charla formal” con Goldfajn, y espera profundizar el vínculo en próximos encuentros. Desde su cuenta de Twitter, Kristalina Georgieva dijo que fue una "muy buena llamada" para "hablar sobre la implementación del programa de Argentina". Y añadió: "Esperamos continuar nuestra constructiva colaboración para promover la estabilidad económica y el crecimiento inclusivo en en un entorno global muy desafiante".

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Tweet de FMI

El ex ministro de Economía, Martín Guzmán, había acordado con el jefe del departamento del Hemisferio Occidental del FMI el cumplimiento de las metas “anuales” pero que se flexibilicen las trimestrales, debido al cambio de escenario mundial generado por la invasión de Rusia a Ucrania.

Lo cierto es que la súbita renuncia de Guzmán generó el temor a que haya un cambio hacia políticas de mayor déficit fiscal e inflación, lo que alejaría al gobierno de Alberto Fernández del cumplimiento de las metas.

Esto fue explicitado hoy por el titular de la consultora MacroView, Rodolfo Santángelo, para quien “el escenario económico se complicó mucho, y ya veníamos complicados desde fines del año pasado”.

En marzo, “cuando se alcanzó el acuerdo con el FMI, la inflación venía con un piso de 60%, luego por la guerra pasó a 70% y ahora a 80%; al que se suman el cepo a las importaciones y la renuncia de Guzmán”, describió Santángelo en declaraciones a CNN-Radio.

Goldfajn es un economista ortodoxo que fue presidente del Banco Central de Brasil, y siempre manifestó su apoyo crítico al acuerdo alcanzado con Argentina.

El representante del FMI,  dejó en claro que "los supuestos (macroeconómicos) podrían cambiar debido al nuevo marco de la economía global, (o) nuevos shocks".

Sin embargo, "los objetivos (pactados con Argentina) son fiscales, de reservas y estructurales y esos no cambiarán, porque tenemos objetivos formales y lo que debemos hacer es ayudar a las autoridades a priorizar las medidas para cumplirlos".