(De la Redacción de DATA CLAVE) Ecolatina advirtió que el Gobierno podría en los próximos días endurecer el cepo o aumentar la cotización del dólar oficial, para evitar la sangría de reservas líquidas del Banco Central que hoy alcanzan los US$ 10.000 millones.

"Dado que el apetito dolarizador no baja, siquiera con el anuncio del arreglo de la deuda, y las Reservas netas continúan en rojo, la situación actual (de venta de US$ 200 por día) no parece sostenible", destacó Ecolatina a través de un documento.

Desde la consultora apuntaron a que el mayor déficit fiscal que provocó la pandemia "se disparó a no menos de 7 puntos porcentuales del PBI, generó un exceso de liquidez que ya desató algunas presiones cambiarias". 

Además, la brecha, así como las Reservas netas, en torno a los US$ 10.000 millones, "se ubican niveles preocupantes. En consecuencia, según cuánto se logre disipar la incertidumbre y con ella el apetito dolarizador, el endurecimiento del cepo o un salto del tipo de cambio oficial serán más o menos probables y necesarios". 

Gráfico de Ecolatina en base a los datos del Banco Central
Gráfico de Ecolatina en base a los datos del Banco Central

Para la consultora que dirige Lorenzo Sigaut Gravina, "calmar la demanda de divisas, aumentar el apetito pesificador", ya sea disipando la incertidumbre o mejorando el rendimiento de las opciones en moneda local, "son tan difícil de lograr en el corto plazo, como atractivos son sus resultados".

Destacó en el informe que el aumento del dólar oficial "será convalidar un salto cambiario, corrigiendo el desequilibrio del mercado cambiario por precios. Esta opción tendría un claro impacto negativo en materia de inflación y actividad en el corto plazo, de modo que no lo vemos como una salida probable". 

No obstante, "dado que la suba de precios se acelerará con la salida de la cuarentena, y que cada vez parece más difícil llegar hasta octubre de 2021 -elecciones legislativas- sin una corrección del tipo de cambio o una relajación de la brecha, prevemos que la tasa de depreciación del peso se aceleraría hacia fin de año, aunque sin disparadas".