El IERAL apuntó a que no existen las condiciones previas que permitieron lanzar el plan Austral, ni recrearse la Convertibilidad, y a su vez, “con gradualismo será extremadamente difícil salir del andarivel de una inflación instalada en el 50 % anual, con riesgos ciertos de seguir escalando”. 

La casa de estudios de la Fundación Mediterránea destacó que “a diferencia del Austral y de la Convertibilidad, que fueron anunciados “por sorpresa”, existe un antecedente de plan de estabilización de shock pero “secuenciado”, que es del Plan Real, anunciado a fin de 1993, aprobado en el Congreso brasileño e implementado meses después”

Los contratos se desindexaron, pero lo que dio credibilidad inicial al plan fue una política fiscal que duplicó el superávit primario del sector público, de 2,3 % del PIB en 1992 a 4,3 % en 1994, con un cambio en las expectativas que derivó en una duplicación de las reservas netas del Banco Central, de US$ 32.200 a US$ 60.100 millones entre 1993 y 1996.

Estos “objetivos ambiciosos en materia de superávit primario“ sólo podrían lograrse con un acuerdo con todos los gobernadores “eliminando superposición de partidas presupuestarias entre Nación, Provincias y Municipios, reordenando los sistemas previsionales y generando incentivos para el blanqueo de la economía, en base a una progresiva sustitución de los impuestos más distorsivos” como Ingresos Brutos, al cheque, y retenciones.

Esto permitirá “proyectar un descenso gradual pero sostenido del ratio deuda pública/PIB” que “a su vez, una de las principales condicionalidades de cara a un eventual acuerdo con el Fondo Monetario Internacional” 

Sin embargo, el IERAL advirtió que “no es posible anticipar en qué momento habrán madurado las condiciones políticas en Argentina para este tipo de debates”.

“Mientras tanto “el “taxi” de la deuda pública, asociada al déficit fiscal, dejará cada vez menos espacio a los argumentos escapistas”.  Entre el 2015/19 la deuda pública aumentó a un ritmo anual de US$ 19.500 millones (tipo de cambio oficial) mientras que, desde fin de 2019 hasta el presente, el incremento ocurre a razón de US$ 20.500 millones, advirtió la casa de estudios.