La economía cerró el año pasado con un crecimiento del 5,2%, pero en los últimos cuatro meses mostró caídas intermensuales consecutivas y en diciembre un retroceso del 1,2% respecto a igual mes del 2021. Así lo informó este jueves el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) que dio a conocer las cifras del Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE), un registro que reúne varios de los componentes que integran el Producto Bruto Interno (PBI). 

Lo cierto es que si bien se esperaba un resultado negativo para diciembre, debido a la sequía que afecta al campo, y la caída del 2,7% en la industria y del 10% en la construcción, los analistas no esperaban un descenso tan pronunciado. 

Para el año en curso, el ministro Sergio Massa y su equipo han planteado un crecimiento de la economía en torno al 2%, que de concretarse, sería la primera vez que se encadenan tres subas consecutivas desde el período 2006-08.

Desde la consultora Econciews anticiparon que la caída de la actividad en el último mes del 2022 implica un "arrastre estadístico" para el 2023 es prácticamente nulo y se proyecta una economía más bien estancada para el año electoral en curso. La casa de estudios que dirige Miguel Kiguel recordó que la última vez que se registró una racha de tres o más caídas consecutivas mensuales de la actividad (sacando el 2020 con la pandemia), fue entre marzo y junio de 2018, en con cuatro caídas mensuales seguidas. 

"Dada la gravedad del contexto climático que está afectando al campo tiene lógica que el único sector que presenta una caída acumulada (del 2,6%) respecto al 2021 sea agricultura, ganadería, caza y silvicultura”, destacó el informe. 

"Para el 2023, los primeros meses del año no vienen con buen impulso como ocurrió en el 2022 y que sumado a la sequía y la falta de insumos será prácticamente imposible ver a la economía en la senda de crecimiento, es por esto que proyectamos un año de crecimiento nulo y cierto grado de estancamiento, no muy distinto a lo que se viene observando en la economía argentina hace ya una década", afirmó Econviews. 

En el mismo sentido, la consultora LCG indicó que la actividad durante noviembre “ya dio signos de agotamiento y si bien no esperamos una recesión profunda, tememos un escenario de leve caída en el PBI para este año impulsado”. 

Este ligero retroceso estaría sustentado en “el ajuste fiscal, una menor demanda de inversión y un consumo privado al que se le contraponen dos fuerzas opuestas: la caída del salario real y la alta inflación que fomenta el desprendimiento de pesos", destacó LCG en un documento.