Luego de cinco meses en baja, las expectativas de inflación de los consumidores argentinos volvieron a subir y se ubicaron ahora nuevamente por encima del 50%. Esa dinámica se da en el marco de una suba de precios generalizada con un incremento en las expectativas de devaluación.

Así lo indicó el estudio mensual que realiza el Centro de Investigación en Finanzas (CIF) de la Escuela de Negocios de la Universidad Torcuato Di Tella sobre la base de una encuesta nacional realizada por la Poliarquía Consultores.

La Encuesta de Expectativas de Inflación (EI) de noviembre de 2021 arrojó que la población prevé que en los próximos doce meses los precios de la economía doméstica se incrementarán 50,4%, según el promedio de las respuestas.

Sebastián Auguste, director del CIF UTDT, explicó que los datos para este estudio fueron recolectados entre los días 2 y 12 de noviembre, por lo que la previsión expresada es anterior a las elecciones legislativas del 14 de noviembre.

El resultado de noviembre representó un aumento de 3,7 puntos porcentuales respecto a la medición de octubre, cuando la expectativa de inflación para los próximos doce meses había sido del 46,7%.

Desde junio de 2021, cuando había tocado un pico de 51,4%, la inflación esperada venía con una tendencia decreciente, llegando en octubre al nivel más bajo desde abril de este año, dice Di Tella. El aumento en las expectativas de inflación en noviembre fue generalizado, para todas las regiones y para los distintos niveles de ingreso.

Por regiones, el Gran Buenos Aires sigue siendo la que menos expectativas de inflación presenta, con un 48,7%; y por tipo de ingreso, los hogares de menores recursos esperan menos inflación aunque la brecha se achicó mucho. En octubre, los hogares de ingresos altos esperaban 49,3% y los de ingresos bajos 44,8%, en noviembre fue de 51,1% y 47,9%, respectivamente.