El expresidente del Banco Central, Martín Redrado, se mostró distinto a sus pares y aseguró que Argentina todavía cuenta con alternativas para poder superar el trauma de la inflación. Sin embargo, planteó que debe haber un pacto consistente y "no cinco personas que opinen cada una por su cuenta".

"No estamos condenados a la inflación, pero es evidente que la medicina y la políticas económicas utilizadas para para combatirla han fracasado", comenzó diciendo el economista, en una entrevista con Radio Mitre.

El extitular del principal banco argentino, hoy alejado del Frente de Todos pero todavía de buen vínculo con Sergio Massa, planteó que "Argentina ha probado hasta ahora con recetas mágicas: dólar fijo, tasas de interés, precios máximos o cuidados" y que son "siempre visiones parciales de la realidad, en vez de tener un programa antiinflacionario integral y convergente: todas las variables deben apuntar a una inflación descendente que ancle las expectativas".

Y luego, en una versión un tanto optimista, planteó: "Tenemos que dar vuelta la actitud de brazos caídos respecto del futuro, porque la política económica no nos da guías sobre el futuro".

Por otra parte, Redrado cuestionó los acuerdos de precios y señaló como "improductivas" las decisiones que tomó el secretario de Comercio, Roberto Feletti"Vamos con la cosa efectista de tener 800 productos que tal vez están dos semanas en la góndola, mientras las decenas de miles de productos que consumen los argentinos siguen por otro lado, por no atacar los problemas del fondo".

"Hay que generar conjunto de leyes, porque la falta de credibilidad y previsibilidad se resuelve con respaldo político, que hoy se logra con Congreso, con leyes apoyadas por oficialismo y oposición, en materia fiscal, monetaria, cambiaria, de desarrollo de la infraestructura", agregó.

El economista resaltó que "hoy la situación mundial le da otra oportunidad a la Argentina", debido al aumento de los precios de los alimentos y la energía, pero el país tiene los hidrocarburos bajo tierra. "Hoy recomendaría que el presidente se reúna con sus pares de Francia y Alemania para que vengan a invertir y sacar el gas y no dependan tanto del gas ruso", apuntó.

También planteó cuáles deben ser las condiciones para diseñar un programa económico razonable y estable: "Lo que no me cabe duda es que las condiciones objetivas son un programa económico, un equipo económico coherente y coordinado, no cinco personas que opinen cada una por su cuenta, leyes que respalden y marquen el camino".

Por otra parte, Redrado planteó que para que el país funcione se debe apuntar a reducir la carga del Estado y la cantidad de ministerios. Incluso, llegó a decir que se tiene que pasar de 22 ministerios a 8 y que funcionen con "eficiencia". "A los políticos les va mejor y a los ciudadanos les va peor", opinó, y agregó que los ministerios deben contar con "menos estructura administrativa, no tantas secretarías y subsecretarías".

El economista recordó, además, que los argentinos tienen unos U$S 150.000 millones físicos dentro del país. "La política impositiva debe ser para que esos ahorros se vuelquen a aumentar el consumo, la inversión y la capacidad productiva", dijo.

Por último, manifestó: "Soy partidario de una política económica y social que incentive a la gente a consumir más y a los empresarios a ampliar la capacidad productiva. La actual política económica reprime, pone cepos e imposibilita prever el futuro".