El repunte de casos de COVID-19 pone en alerta a la comunidad mundial. Rusia cerrará sus lugares de trabajo durante una semana, Letonia volvió al confinamiento estricto durante un mes, mientras que el Reino Unido registró el mayor número de muertos desde principios de marzo.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que los casos de coronavirus aumentaron en Europa por tercera semana consecutiva, con alrededor de 1,3 millones nuevos contagios, lo que significa un aumento del 7 por ciento.

Reino Unido, Rusia y Turquía son los países con mayor número de infectados mientras que la cifra se redujo en los países de África y de la región del Pacífico Occidental. Al mismo tiempo, los gobiernos alrededor del mundo comenzaron a flexibilizar las restricciones frente al avance de la vacunación, pero los investigadores estudian ahora posibles mutaciones y ponen en duda las estrategias sanitarias.

Rusia batió un nuevo récord de muertes y el presidente Vladimir Putin avaló la propuesta de su gabinete para implementar "una semana no laborable en todo el territorio nacional" y así frenar el repunte de casos. Según datos oficiales, menos de un tercio de su población se encuentra completamente inmunizada y preocupa la reticencia a la vacunación.

Una situación similar atraviesa Letonia luego de resolver el confinamiento estricto de su población, así como un toque de queda nocturno durante las próximas cuatro semanas. Este es el primer país europeo en reimplantar este tipo de medidas, sin embargo, no se descarta que otros gobiernos tomen decisiones similares.

En este sentido, el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido le exigió al Gobierno de Boris Johnson un “plan B” de emergencia, como imponer el uso obligatorio de mascarillas, incentivar nuevamente el teletrabajo y acelerar la vacunación en los niños.