Un popular refrán dice que quien se quema con leche ve una vaca y llora. Y en Migraciones, después del hackeo al sistema informático de la Dirección Nacional, existe cierta paranoia por “manos negras” y ataques contra la gestión actual. Este miércoles circuló la versión de que 800 empleados del organismo habían sido despedidos en las últimas horas, pero sus autoridades cuentan que todas las semanas están “desarmando operaciones como estas”.

Sin embargo, el mensaje que todavía gira por algunos teléfonos contiene información que puede asociarse a una situación ocurrida recientemente. El texto decía: “Echaron a 800 empleados contratados en Interior, oficina Migraciones”. Lo cierto es que hubo cesantías hace poco más de un mes, según confirmaron voceros del organismo a Data Clave. “No fueron ni 800 ni 600”, aclaran. Los despidos tuvieron que ver con sumarios acumulados de la pandemia a partir de distintas acusaciones.

Desde la DNM cuentan que “cuando se levantó la prohibición de despidos que había fijado el Gobierno, se habían acumulado situaciones de distinto tipo”. Hubo sumarios por cohecho, abandono de puestos de trabajo y cobro de residencias a ciudadanos chinos, según pudo averiguar este medio, varios de ellos ya judicializados. “Eran en total alrededor de 50 empleados, todos con sus denuncias correspondientes”, que fueron removidos de sus puestos de trabajo hace más de un mes según la información oficial.

En el organismo creen que “hay una operación permanente sobre Migraciones desde que desarmaron algunos dispositivos”. Luego del ciberataque, sostienen que hubo “movidas trolls” que hicieron que se corrieran rumores “por todos lados”. Mientras tanto, unas 50 personas ya no trabajan en la Dirección Nacional y son investigadas tanto por los funcionarios como, en algunos casos, por la Justicia.

FRAGMENTOS DEL COMUNICADO OFICIAL

La Dirección Nacional de Migraciones (DNM) informa que el organismo, en lo que va de esta gestión, dejo sin efecto 49 contratos por diversos incumplimientos, entre los que se destacan ingreso ilegal de mercaderías al país, falsificación de firmas, de sellos migratorios, cobro ilegal de aranceles y denuncias por maltrato.

En ese sentido la DNM, que en la actualidad cuenta con una planta de 3906 trabajadores, actuó ante cada una de estas situaciones conforme a los procedimientos legales, instruyendo apercibimientos, sanciones e iniciando sumarios, que concluyeron en la cesación de contratos.