El Mercado de Hacienda de Liniers tuvo su última jornada de comercialización de ganado este viernes, antes de su mudanza al nuevo Mercado Agro Ganadero (MAG) ubicado en Cañuelas. Llevaba más de 120 años operativo en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

La última rueda de ventas del Mercado de Liniers se desarrolló con una entrada de 1370 cabezas. La baja oferta se debió a las lluvias que afectaron a gran parte del país, y al feriado del jueves. En la semana se vendieron 17.694 animales.

Cabe señalar que el Mercado de Liniers es el mayor mercado de comercialización ganadera de Sudamérica, donde se forman los precios de referencia para la compra-venta de animales. De allí la trascendencia de su mudanza. 

Ahora, deja su histórico emplazamiento en Mataderos, tras 121 años en el barrio que en su origen se denominó como la Nueva Chicago por la ciudad estadounidense, que en aquel momento era el centro de la industria cárnica norteamericana y era el modelo a imitar.

De esta manera, a partir del próximo miércoles, la principal plaza de comercialización de ganado se concentrará en un predio de Cañuelas, que contiene 110 hectáreas en el kilómetro 88 de la ruta provincial 6. Tendrá una capacidad para 12.000 cabezas diarias, con la posibilidad de ser ampliado para recibir unas 6.000 adicionales.

La operación requirió de 20 millones de dólares, que fueron reunidos por los 45 consignatarios de hacienda que forman parte del Mercado de Liniers. Allí se hicieron 55.000 metros cuadrados de hormigón para la hacienda, y se construyeron 450 corrales de venta y 2.570 metros de pasarelas aéreas.

Cabe señalar que este traslado se viene postergando desde hace más de 20 años. En el 2001 se sancionó en la legislatura porteña la ley 622 que determinó la prohibición del ingreso de ganado a la capital. Desde entonces se fueron extendiendo distintos permisos para que continúe la actividad ante la dificultad para encontrar un nuevo predio.

Uno de los objetivos de la mudanza es descomprimir el tránsito en una zona muy congestionada de la Ciudad. Así, se contribuirá a reducir drásticamente la emisión de gases y ruidos. Además, la nueva ubicación garantiza a los productores reducir los costos de logística y transporte.