Esta mañana, con firmas del presidente Alberto Fernández, del jefe de Gabinete Santiago Cafiero y del Canciller Felipe Sola, se publicaron los decretos que oficializan a cinco embajadores argentinos en España, Perú, Nicaragua, Hungría y Grecia.

Entre los diplomáticos que asumirán cargos hay nombres fuertes de la política, cuadros que reaparecen con los gobiernos peronistas y un viejo conocido que tuvo que declinar su designación como embajador en Perú: “Chacho” Álvarez. El exvicepresidente, de 71 años, es paciente de riesgo por tener EPOC y desistió de su postulación al cargo.

El lugar previsto para “Chacho” será ocupado por Enrique Vaca Narvaja, hermano del líder montonero Fernando Vaca Narvaja. Enrique es diplomático de carrera de bajo perfil y había estado al frente de la Dirección de Integración Económica de América Latina y el Caribe.

Ricardo Alfonsín será embajador argentino en España. Su pliego recibió acuerdo del Senado a principios de mes. En febrero, tras aceptar el ofrecimiento de Alberto Fernández, el dirigente radical dijo que la decisión era de Estado y no partidaria. En ese entonces recordó a su padre Raúl Alfonsín, quien durante su presidencia designó diplomáticos peronistas y “nunca pidió que dejaran su bandería política”.

Un Capitanich estará al frente de la embajada de Nicaragua: el hermano del gobernador de Chaco y exvicegobernador Daniel Mateo Capitanich fue oficializado en el cargo y expresó “orgullo y placer” por representar a la Argentina. Daniel Mateo es productor agrícola. En las últimas elecciones provinciales fue candidato a intendente en Presidencia Roque Sáenz Peña, ciudad de donde es Oriundo, pero perdió los comicios por 20 puntos. Anteriormente fue jefe comunal de la localidad de Campo Largo y tuvo un cargo en ANSES.

Hernán Patiño Mayer, autodenominado “embajador de todos los gobiernos justicialistas” por su larga trayectoria, estará al frente de la embajada argentina en Hungría. Es la quinta vez que se presenta para ocupar cargos en dependencias en el exterior. Fue representante argentino ante la OEA y dos veces embajador en Uruguay durante las presidencias de Eduardo Duhalde, Nestor Kirchner y Cristina Fernández. En declaraciones recientes, dijo que que con Hungría, Croacia y Bosnia-Herzegovina "tenemos una relación light”.

En tanto, María Lucía Dougherty, ex cnsul argentina en Roma y una de las responsables de la gestión de vuelos de repatriación para varados en Italia, fue oficializada como embajadora en Grecia.