En el año 1994 se produjo un cambio en los procesos electorales del país. Entre otras decisiones estructurales que se realizaron con la reforma de la Constitución, se abandonó el sistema indirecto y se estableció el sistema directo para la elección de presidente y vicepresidente. 

Con esta modificación, la Provincia de Buenos Aires pasó a ser la protagonista central del proceso electoral debido a su peso específico: el 38% del padrón electoral. Dentro de la misma, el conurbano bonaerense llega al 25% de ese padrón. Por lo tanto, la política argentina tuvo un cambio drástico tanto en incentivos como en estrategias necesarias para vencer en las elecciones. Los que mejores interpretaron y se adaptaron a ese cambio fueron Néstor y Cristina Kirchner. El ejemplo de ello se encuentra fundamentalmente en el año 2005, cuando Cristina Kirchner vence a Hilda “Chiche” Duhalde como Senadora por la Provincia de Buenos Aires, con especial relevancia en el Gran Buenos Aires. De esta manera, lograron marcar la agenda pública en los últimos tres lustros en todo el país.
En el año 2015, Mauricio Macri logró triunfar como presidente, entre otros motivos, debido a su buena lectura de la situación provincial y mediante la revelación de ese año cristalizada en la figura de María Eugenia Vidal.

Como se señaló, la reforma constitucional cambio para siempre los procesos electorales. Si a Buenos Aires le agregamos la Ciudad Autónoma encontraremos más del 46% del padrón electoral y sólo el área metropolitana, abarca un tercio de ese padrón. 

Desde el punto de vista electoral, el país se encuentra literalmente partido en dos: área metropolitana e interior. No es casual, entonces, que los últimos presidentes provengan del área metropolitana: Cristina Kirchner, Mauricio Macri y Alberto Fernández. Si analizamos brevemente los nombres que se asoman con cierta proyección para el año 2023, también observamos este claro sesgo geográfico: Máximo Kirchner (La Plata) Sergio Massa (San Martín), Axel Kicillof (CABA), Horacio Rodríguez Larreta (CABA), Patricia Bullrich (CABA), Martín Lousteu (CABA). Del resto del país sólo puede visualizarse a Sergio Uñac (San Juan) por el oficialismo o Alfredo Cornejo (Mendoza) por la oposición, quien ha manifestado abiertamente sus convicciones por ser candidato.  

Resulta indudable que la dirigencia política debe comenzar a generar una mayor integración política en los hechos y demostrar que las decisiones no sólo ocurren en los 13.285 km2 del área metropolitana sino en toda la enorme integralidad y complejidad de nuestro vasto país.