En medio de los simbronazos que sufrió el Gobierno nacional por el escándalo del Olivos Gate, en Juntos hubo algunas diferencias estratégicas de cara a la contienda electoral. Mientras el PRO y la Unión Cívica Radical (UCR) pidieron juicio político para Alberto Fernández, la Coalición Cívica no se unió a esa petición.

Tras conocerse las fotos del Presidente violando el propio DNU en la Quinta de Olivos junto a la primera dama, Fabiola Yánez, la oposición estalló y decidió plegar posiciones para atacar al oficialismo.

Si bien desde la coalición Juntos saben que no tienen los votos suficientes para destituir al jefe de Estado en el Congreso, las denuncias y pedidos ya están en curso con las participaciones principales de los diputados Luis Petri, Waldo Wolff, Mario Negri y Soher el Sukaria, entre otros.

Sin embargo, una voz que faltó en los papeles es la de la Coalición Cívica, el “faro moral” de Juntos y el partido minoritario dentro del espacio. A pesar de la última ofensiva contra el propio Facundo Manes, a quien Elisa Carrió iba a demandar por haberse sentido “desprestigiada” públicamente, esta vez no hubo una presentación judicial contra el jefe de Estado.

¿Cuál es el argumento? Desde el espacio de Lilita deslizan que ella, durante la campaña electoral, nunca realiza denuncias y que por eso decidieron no firmar un proyecto conjunto para presentar en el Parlamento.

Las posiciones sobre el Olivos Gate fueron diversas y se vertieron en las redes sociales, donde todos buscan sacar provecho electoral. Sin embargo, uno de los principales candidatos del radicalismo por la Ciudad de Buenos Aires, el economista Martín Tetaz, planteó: “Tampoco nos pasemos de rosca pidiéndole la renuncia o el juicio político a Alberto Fernández porque atrás viene Cristina (Fernández de Kirchner). El lugar para castigar tiene que ser las urnas y la paliza tiene que ser monumental”.

Con esta situación, la coalición opositora tendrá uno de sus habituales zoom de campaña el próximo lunes para ponerse de acuerdo sobre qué medidas tomarán de acá en adelante para rechazar la última foto que se viralizó de Alberto Fernández y su pareja.