Como ha ocurrido otras tantas veces con productores de frutas y verduras, esta vez fue el turno de los panaderos del Área Metropolitana de Buenos Aires. Trabajadores del sector se acercaron a la Plaza Miserere y regalaron alrededor de mil kilos de pan y productos panificados para protestar contra la desregulación en los precios, y lo que consideran como aumentos injustificados que perjudican el consumo.

“Hace mucho tiempo venimos reclamando por los aumentos irregulares que hay en las materias primas como la harina, las tarifas, los alquileres, y las naftas. Estamos pidieron políticas de Estado que ayuden a regularizar los precios”, aseguró Gastón Mora, titular del Centro de Panaderos de Avellaneda, en diálogo con Radio AM750.

Los protestantes insistieron en que no se trató “de una protesta contra el Gobierno”, sino “hacer público un legítimo reclamo de los trabajadores de la industria”. Aclararon, a su vez, que en caso “de mantenerse la merma en los consumos por el precio del pan se seguirán cerrando panaderías y perdiendo puestos de trabajo”.

No es una situación aislada, y es una preocupación que es motivo de discusiones y negociaciones entre el Gobierno y el sector privado. En ese sentido, Mora agregó que ya elevaron un pedido a la Secretaría de Comercio para que aplique políticas que permitan el abastecimiento del trigo.

Y aseguró que se ha establecido un diálogo con el Ministerio de Desarrollo Productivo para que se realice la compra de un Molino de gestión estatal que permita el abaratamiento de los costos.

“También planteamos la conformación de la Junta Nacional de Granos. Hoy tenemos un Estado que está preocupado por el abastecimiento de la comida”, concluyó Mora tras un reclamo que incluyó, para aquellos que fueron por un pedazo de pan, una chocolatada o mate cocido.