Los representantes de las cámaras farmacéuticas se reunieron este jueves con el Secretario de Comercio, Roberto Feletti y la Ministra de Salud, Carla Vizzotti y se avanza en un acuerdo para congelar el precio de los medicamentos hasta el 7 de enero.

Fuentes gubernamentales confirmaron que los empresarios manifestaron su voluntad de llegar a un acuerdo que permita retrotraer el precio de los fármacos en todo el país al 1 de noviembre hasta el mes de enero.

Adicionalmente, llevaron adelante una mesa intersectorial donde se recordó la importancia que tiene para la salud pública la prescripción de medicamentos por nombre genérico vigente desde 2002, para que los consumidores puedan elegir el rango de precio. 

Congelamiento de precios para medicamentos: principio de acuerdo entre el gobierno y las farmacéuticas

Asimismo, se consensuó retomar la carga de precios por parte de los laboratorios en el Vademecum Nacional de Medicamentos que publica la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT), para llevar adelante el monitoreo y seguimiento de precios de modo que resulten accesibles para toda la población.

Los representantes de las Cámaras se comprometieron a llevar la propuesta al resto de los actores que componen dichas entidades y a responder a las autoridades nacionales antes del día lunes 8 de noviembre.

Por parte del sector farmacéutico participaron Nicolás Vaquer y Carlos Escobar de la Cámara Argentina de Especialidades Medicinales (CAEME); Laura Fabra y Alejandrina Arauz de la Cámara Argentina de Productores de Medicamentos Genéricos y de uso Hospitalario (CAPGEN); Eduardo Macchiavello y Eduardo Franciosi de la Cámara Industrial de Laboratorios Farmacéuticos Argentinos (CILFA); Juan José Marconi de la Cámara Empresaria de Laboratorios Farmacéuticos (COOPERALA); María Isabel Reinoso y Ricardo Pesenti de la Confederación Farmacéutica Argentina (COFA); Carlos Alberto Sandoval y Miguel Osio de la Federación Farmacéutica (FEFARA).

Desde el sector sindical plantearon algunas consideraciones al respecto de este tipo de controles. "Lo que tienen que controlar no es el precio de la aspirina o el ibuprofeno, si no los medicamentos catastróficos o de alto costo", acotaron. "Para el tratamiento de la fibrosis quística o la artrofia muscular espinal hay fármacos que son de los laboratorios extranjeros y cuyo precio oscila entre los trescientos mil y los dos millones de dólares, que terminan dinamitando las finanzas de las Obras Sociales", completó la fuente.

El gremialista consultado detalló que "estos planteos se los hicimos al presidente de la Nación, a la Superintendencia y al Ministerio de Salud, remarcándoles que de esto se debe hacer cargo el Estado a nivel Nacional, pero lamentablemente nunca dieron respuesta".