En el año de los batacazos históricos contra el peronismo, finalmente se dio la derrota más anunciada: el fin del kirchnerismo en Santa Cruz. Sí, tras la hegemonía del peronismo y cuatro décadas de supremacía en las urnas, la ciudadanía les dio la espalda. Este domingo 13 de agosto, el diputado nacional y dirigente petrolero Claudio Vidal se impuso en las elecciones provinciales y será el nuevo gobernador.

La elección tiene varias aristas a tener en cuenta, pero la primera que salta a la vista es que el peronismo santacruceño perdió en su ley (de lemas): Vidal se presentó junto a otros cinco sublemas que traccionaron para que Por Santa Cruz sea el lema más votado. Por décadas, esa había sido la estrategia del justicialismo para retener el poder. Derrotados por sus propias reglas.

Otro ítem a señalar es la falta de un liderazgo claro que reemplace a la figura de Alicia Kirchner. La gobernadora decidió no ir por otro mandato y no hubo sucesor natural. La estrategia fue sacar a la cancha a los intendentes de las ciudades más importantes y apostar al territorio. No les fue mal, cumplieron. Pero no alcanzó. Tampoco fue suficiente la presencia de AK en la boleta al Senado ni los actos con Cristina. Hace tiempo se cocinaba el escenario que hoy decantó en la derrota. 

El peronismo no supo unificar criterios detrás de un candidato, ya sin Alicia Kirchner al frente de la boleta.
El peronismo no supo unificar criterios detrás de un candidato, ya sin Alicia Kirchner al frente de la boleta.

Este año, Alicia no se inclinó por ninguno de los dos principales candidatos, los intendentes Javier Belloni (El Calafate) y Pablo Grasso (Río Gallegos) y la puja entre ambos fue muy pareja, con diferencia de apenas mil votos en favor del alcalde capitalino. La conducción del peronismo a futuro es una incógnita y será parte de la discusión que debe encabezar la reconstrucción del PJ.

Dos años atrás, Vidal dio el primer aviso al correrse del oficialismo y fundar su propio partido, con el que además le ganó al peronismo y llegó al Congreso. También en 2021 la versión provincial de JxC, Cambia Santa Cruz se impuso al PJ. “Siempre se pierden las legislativas, la general es otra cosa”, decían los peronistas entonces y llegaron confiados al 13 de agosto. Y pudo haber sido peor: la alianza opositora llegó dividida y hubo más de 8 puntos que se fueron con Roxana Reyes. De lo contrario hubiese sido una derrota categórica y no por 3 puntos.

Claudio Vidal se impuso en el lema Por Santa Cruz por poco menos de 3 puntos.
Claudio Vidal se impuso en el lema Por Santa Cruz por poco menos de 3 puntos.

Por si no alcanzaran las particularidades, hubo otro hecho que merece atención y denota cansancio en la sociedad: casi 10% de voto en blanco en la categoría gobernador. Diez puntos que podrían haber cambiado la elección para uno y otro lado, pero ninguna oferta los convenció. Ese factor también se vio reflejado en otro hito en la noche: Javier Milei fue el candidato a presidente más votado en Santa Cruz.

Demasiadas singularidades en una provincia atada a la tradición de ser gobernada por el mismo partido, casi sin discusión. En 2019, Alicia Kirchner fue reelecta por buen margen luego de haber terminado atrincherada dos años antes, en plena protesta social por sueldos adeudados. Si entonces no perdió el PJ parecía que nunca lo haría. Pero cuatro años después, en medio de una PASO nacional marcada por la apatía por los partidos tradicionales, sucedió.