Las medidas de ajuste anunciadas por el ministro de Economía, Luis Caputo, generaron un fuerte cimbronazo en una situación financiera y social del país ya muy erosionada. El plan motosierra del presidente Javier Milei ya se hace sentir, aunque también hubo recorte del gasto público, con la revisión del Estado y la suspensión de la pauta publicitaria por un año. 

En este último punto, hubo varios gobernadores que comenzaron a ajustar sus cuentas. Uno de ellos fue el mandatario santacruceño, Claudio Vidal, que este viernes anunció una serie de medidas en la misma línea de Nación. “Hemos tomado la decisión con todo el gabinete de eliminar la totalidad de los viáticos al sector político, reducir la pauta publicitaria al 50%”. Se trata del mismo gobernador que venció al Kirchnerismo después de casi 4 décadas de hegemonía.

“Vamos a eliminar las unidades retributivas de funcionarios y cargos políticos. Lamentablemente, durante estos años las han utilizado para pagar la limpieza de sus hogares, niñeras, jardineros, cosa que no corresponde”, agregó. Y advirtió: “Hemos tomado la decisión de llevar adelante la venta y remate del 80% del parque automotor para la construcción de nuevas escuelas”.

También hubo tiempo para enviar un mensaje a la gestión anterior de Alicia Kirchner en particular y al kirchnerismo en general: “La política no tiene que seguir dependiendo o disfrutando de los lujos que da el Estado. Además, vamos a rematar o vender la residencia de la localidad de El Calafate". Y sumó: "Hay un sector político al que seguramente no le va a gustar, pero esto es del Estado y el dinero que logremos obtener por la residencia también va a ser destinado para la construcción de establecimientos públicos educativos”.

“Vamos a eliminar 1480 líneas celulares que algunas están distribuidas en Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe. No se vive más del Estado. Vamos a solicitar, a través de un decreto, una auditoría general de la totalidad del Estado”, aseveró el Gobernador. Y remarcó: “El Estado realmente hoy se encuentra en una situación difícil, de mucha desorganización y falta de fondos para el buen funcionamiento”.

En la misma línea, disparó: “Al parecer hay sectores que no entienden que no están más, que se terminó la fiesta. Estamos esperando las renuncias de varios cargos políticos y entendiendo la urgencia de poder afrontar los gastos que genera el pago de aguinaldo y salarios. Hemos tomado unas medidas de poco agrado para los que están acostumbrados a vivir de la política”.