Gregorio Dalbón asumió la querella en representación de los padres de Lucas González, el jugador de 17 años de las Inferiores de Barracas Central que murió tras ser baleado por policías, y expresó que “la violencia institucional debe cesar”.

En ese marco, apuntó directamente contra el juez de la causa, Alejandro Rodolfo Cilleruelo: “No podemos creer que al momento los asesinos a sangre fría estén impunemente en libertad”. Explicó que los policías involucrados son “autores penalmente responsables de homicidio doblemente calificado por haber sido cometido como policías y con armas”.

“Vamos a hacer todo lo necesario para lo que hicieron con uno de los niños, que lo dejaron preso toda la noche, también se pague, para que el juez de menores que tuvo la causa y se la sacó de encima dejando en libertad a los policías, tenga un juicio en el consejo de la Magistratura”, agregó el letrado durante una conferencia de prensa.

Por último, remarcó que “la violencia institucional en Argentina debe cesar porque da de patadas con la democracia, estas cosas sucedían en la Dictadura militar, no en democracia. Desde la época de Alfonsín hasta esta época, hay que cesar con la violencia institucional”.

Lunes de marcha

Por otra parte, la familia de la víctima convocaron a "una marcha pacífica con una vela y bandera argentina”, para pedir justicia. La manifestación será frente al Palacio de Tribunales el próximo lunes a las 19 y pidieron no llevar banderas políticas.

Tweet de IP Noticias

“Me importa una mierda la política, me importa hacer justicia por mi hijo que ya no lo tengo. Quería a mi hijo llevármelo a mi casa y no estar acá”, expresó el padre entre lágrimas y planteó su objetivo de “que esto no pase más, que no haya ningún Lucas más”.