Meses atrás la dirigencia PRO aseguraba que las diferencias internas se terminarían acomodando por consenso y que no había posibilidad de terminar en una elección para definir quién sería el candidato a gobernador bonaerense. Las semanas pasaron. Y la grieta se profundizó al punto de que hoy son los mismos dirigentes los que exclaman exactamente lo contrario. 

Con ese panorama, los precandidatos bonaerenses para el sillón de Dardo Rocha aceleran sus movimientos para dejar en evidencia que las intenciones de pelear son reales

Sin el expresidente Mauricio Macri en la carrera, y a la espera de cuál será su definición, el intendente de Lanús, Néstor Grindetti, lanzará este jueves, en su distrito, su candidatura para gobernador bonaerense en un acto que también servirá para ir acomodando las piezas internas.

Sucede que, según pudo averiguar Data Clave, quien cerrará el encuentro será la titular del PRO, Patricia Bullrich. De esta manera, la precandidata presidencial confirmará tres alfiles propios para la pelea por la gobernación. Junto a a Grindetti, Joaquín De la Torre y Javier Iguacel. Un combo de tres dirigentes no solo experiencia de gestión sino también con pese seccional.

Bullrich se asegura una presencia de peso en las tres primeras regiones de la Provincia. En la primera, con De la Torre, quien hace base en San Miguel; en la segunda, con Iguacel, desde Capitán Sarmiento; y en la tercera, la más complicada, ahora suma a Grindetti. 

Patricia encarna la verdadera voluntad del cambio en la Argentina, es quien mejor representa a Mauricio, lo que viene no va a ser fácil y requiere de firmeza y voluntad real de transformaciones, el cambio profundo requiere de que todos estemos comprometidos y sepamos que es quizás la ultima oportunidad de que nuestra generación pueda torcer el rumbo de la Argentina y dejar un país mejor, tenemos que tener humildad y la grandeza de saber que las transformaciones van a llevar tiempo y quizás nosotros no veamos los resultados pero si nuestros hijos y nietos”, aseguraba semanas atrás durante una recorrida común por Sierra de los Padres, en Mar del Plata.

Lo cierto es que sin Macri en la pelea electoral, Grindetti se suma al equipo de Bullrich. Algo que ya ocurre en los hechos en el territorio donde los equipos técnicos de los tres trabajan cerca también del precandidato a gobernador bonaerense, Cristian Ritondo.

Bullrich se mete de lleno en la campaña bonaerense con el fin de sumar músculo político en Buenos Aires, donde el jefe de Gobierno porteño y precandidato presidencial, Horacio Rodríguez Larreta mejor mide. Se trata, en concreto, de un 38 por ciento del electorado. Con una fuerte concentración del voto entre la primera y la tercera sección, donde el porteño tiene mayor llegada debido a la campaña de proximidad que realizó.

“La idea es tener mayor representación en cada una de las secciones pero también los distritos”, le dice a este medio una fuente del espacio de la exministra de Seguridad nacional.

El problema que enfrenta hoy Bullrich, al igual que Ritondo, es que la gran mayoría de los intendentes se muestra públicamente sin candidatos predilectos pero que, en lo concreto, juegan en favor de Larreta y Diego Santilli. Algo que provoca la bronca de las bases y que tiene su reacción en los jefes comunales, quienes piden mayores definiciones para poder conservar el poder en sus territorios sin que la interna lastime sus deseos de continuar al frente.