La victoria de Javier Milei en el reciente balotaje presidencial se ajusta a un sinfín de explicaciones. Sin embargo, las claves que lo llevaron a imponerse ante Sergio Massa son más claras. Y están a la vista. Una de ellas, sin duda, tiene que ver con lo sucedido en la provincia de Buenos Aires, donde el líder de La Libertad Avanza se quedó con el 49.26 por ciento de los votos y alcanzó la derrota territorial más celebrada de la que se tenga registro.

Sucede que, como es sabido, y como se vuelve a pronunciar hasta el hartazgo en cada elección, en la Provincia se libra la "Madre de todas las batallas". La explicación es simple: el 37 por ciento del padrón electoral vota en Buenos Aires. Y el empuje de la jurisdicción comandada por Axel Kicillof puede torcer cualquier resultado general.

Falta que se carguen los resultados de la Provincia”, suele ser la frase que se escucha en un bunker peronista durante cualquier elección. La respuesta es a medida. Sin embargo, en esta oportunidad,  el sufragio bonaerense no fue suficiente para dar vuelta la ecuación debido a un estrecho margen que bien podría ser referido como un empate técnico.

En los hechos, Milei ganó en 108 de los 135 distritos que componen la Provincia. Y para lograrlo o, mejor dicho, validarlo, necesitó de un pacto concreto con el PRO, quien le facilitó la fiscalización en todo el territorio nacional, pero que tuvo una masiva movilización en Buenos Aires

En ese rol estuvieron abocados los diputados nacionales Cristian Ritondo y Diego Santilli. Pese a que ambos compitieron en la interna por la representación política del PRO en las PASO bonaerenses (el exministro de Seguridad de PBA a través de la candidatura de Néstor Grindetti), con los resultados de octubre sobre la mesa, y luego del pronunciamiento a favor de Milei de Mauricio Macri y Patricia Bullrich, pusieron a disposición el aparato de fiscalización.

Ritondo-Santilli, la dupla que aseguró a Macri la victoria en CABA y ahora fue garante de Milei en PBA

La certificación fue uno de los grandes escollos con los que se encontró La Libertad Avanza tanto en las PASO como en las generales de octubre, con mesas en las que no sumaron ni un solo voto. La lectura interna del resultado hoy es que no habrá un cambio en el escrutinio definitivo de la Provincia, que se está realizando hoy en La Plata, debido a que se “hizo un laburo impecable”, le aseguró a Data Clave un dirigente implicado.

A cargo del recuento definitivo quedaron Sebastián Pareja (La Libertad Avanza) y Guillermo Sánchez Sterli (PRO), quienes funcionaron como nexo entre ambas corrientes para coordinar la fiscalización cruzada que llevó a que haya un movimiento interpartidario para potenciar más el control de las mesas.

Ahora, tanto Ritondo como Santilli hacen fuerza para capitalizar su tarea. El exministro de Seguridad de PBA busca convertirse en el presidente de la Cámara baja del Congreso de la Nación. Y tiene todos los cañones apuntados a lograrlo pese a que desde adentro de La Libertad Avanza hay reparos en la necesidad de poner un mayor número de representantes propios.

Ritondo-Santilli, la dupla que aseguró a Macri la victoria en CABA y ahora fue garante de Milei en PBA

Hay competencia interna. Se habla de Florencio Randazzo y Miguel Ángel Pichetto, pero lo conseguido en PBA no es un dato menor. Ritondo no quiere quedar afuera una vez más de una elección interna, luego de que Grindetti haya sido seleccionado por Bullrich como candidato a gobernador. “Los fiscales los pusimos nosotros. Randazzo y Pichetto no movieron un pelo en la Provincia”, le dijo a este medio un dirigente PRO.

Ritondo-Santilli, la dupla que aseguró a Macri la victoria en CABA y ahora fue garante de Milei en PBA

Santilli, por su parte, atraviesa una encrucijada interna. Su aporte a la campaña de Milei no le cayó en gracia al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, quien se pronunció como neutral. “Los argentinos se manifestaron contundentemente a favor del cambio”, dijo el diputado nacional al conocerse el resultado electoral que podría provocar un reacomodamiento de piezas.

Cabe recordar que tanto Ritondo como Santilli fueron los armadores con los que Macri logró romper la tradición peronista del sur de CABA para poder garantizar la victoria del expresidente en su llegada a la jefatura de Gobierno en 2007. Ahora, ambos se pusieron al frente de la campaña de fiscales con los que Milei logró un resultado clave en la Provincia para catapultar su llegada al sillón de Rivadavia.