Con la consigna “Abajo el DNU”, este miércoles la CGT, las dos CTA y distintas organizaciones gremiales y sociales se concentraron frente a Tribunales en rechazo del mega DNU que presentó Javier Milei. También participaron Unidad Piquetera y partidos de Izquierda.

La movilización a la Plaza Lavalle se realizó en medio de un fuerte operativo de seguridad en el marco del Protocolo anti-piquetes establecido por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. La funcionaria monitoreó el operativo en conjunto con el ministro de Seguridad de CABA, Waldo Wolf y el secretario de Seguridad y Jefe de la Policía de la Ciudad, Diego Kravetz.

Cuando los manifestantes se desconcentraban se produjeron momentos de alta tensión. Un primer foco se produjo luego de que un colectivo de la línea 26 atropellara en el cruce de la avenida Corrientes y Uruguay a un policía de la Ciudad de Buenos Aires que participaba del operativo para evitar cortes de calle. 

Además, sobre el final de la marcha la policía de la Ciudad desplazó a los manifestantes hacia la vereda. Los agentes cortaron la calle y detuvieron a la primera persona: Martin Brunas, un cicloactivista e integrante de Unidad Popular, partido que preside Claudio Lozano. Todo ocurrió sobre Avenida Corrientes. Para las 15:30 de la tarde ya eran al menos 6 los detenidos. 

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Documento de la CGT y presentación judicial

Durante el acto la CGT leyó un documento contra el DNU. “Ser legal es respetar la Constitución nacional. Ser legítimo es convencer a las mayorías. Si no se respeta ese esquema se corre el riesgo de no ser respetado. Y de no ser República. No se confunda señor Presidente. No somos la casta. Somos los trabajadores”, sentenciaron desde la Central Obrera.

Y señalaron: “Vinimos hoy a pedirle a la Justicia que cumpla con la función de contralor el Poder Ejecutivo y declare la inconstitucionalidad del DNU. Frente al atropello irracional de unos de los poderes del Estado, los trabajadores acudimos a la Justicia para que vuelva a equilibrar el funcionamiento de la República”.

“El presidente de la Nación prometió hacer un ajuste que lo pagaría lo que él denomina ‘casta política’, y que los trabajadores recibiríamos los beneficios de ese recorte”, expresaron desde la CGT y precisaron: “Pero su primer acto de gobierno es un decreto de necesidad y urgencia que, entre otras muchas medidas arbitrarias, anticonstitucionales y lesivas de un vasto número de derechos civiles, comerciales y sociales, introduce una feroz reforma laboral regresiva cuyo único objetivo es disciplinar a los trabajadores, cercenar la actividad sindical y solo privilegiar intereses empresariales”. 

Además, la CGT presentó en las últimas hora un recurso de amparo en el fuero laboral para que se suspensa  “en forma urgente” la aplicación de la reforma laboral del DNU. Si bien el Juzgado Nacional de 1° Instancia del Trabajo N° 69 a cargo del juez José Ignacio Ramonet resolvió “asumir la competencia para tramitar” la acción de amparo, desestimó la medida cautelar “interina” para suspender la vigencia de artículos vinculados a la reforma laboral por no estar en vigencia el decreto.