Las PASO del 12 de septiembre fueron un cimbronazo para el gobierno nacional, ya que perdió en prácticamente todo el país. Claro que en algunas provincias, el golpe fue más fuerte que en otras. Uno de los casos emblemáticos es el de Santa Cruz, donde el peronismo gobierna desde la vuelta de la democracia de manera ininterrumpida

El resultado final del domingo dejó a los candidatos de la gobernadora Alicia Kirchner a más de 12 puntos de distancia de Cambia Santa Cruz. Es cierto, la alianza opositora jugó con 6 listas en las primarias y eso aumentó su caudal de votos. Pero también tuvo otra fuga de votos considerable: el referente petrolero Claudio Vidal jugó por afuera y arrimó el 23% de los votos y fue el segundo candidato más votado, detrás del representante del oficialismo, Gustavo “Kaky” González.

Ante este escenario, la administración de la mayor de los Kirchner tiene el desafío de frenar por un lado la arremetida de la alianza opositora que quedó envalentonada tras las PASO, pero también deberá trabajar para recuperar el voto que se llevó Vidal. Si no acomoda las piezas en el tablero a tiempo, corre el riesgo de incluso caer al tercer lugar.

Por este motivo y con vistas a dar un golpe de timón y un mensaje a la población al mismo tiempo, Alicia le pidió la renuncia a todo su gabinete. "La Gobernadora analizará la continuidad del gabinete no hay tiempos ni alcance sólo su criterio de evaluación", apuntó una fuente oficial a Data Clave.

Según aclararon desde el Ejecutivo, la revisión del equipo de gobierno alcanza a "todos los cargos políticos hasta nivel subsecretario". La derrota por más de 12 puntos frente a Cambia Santa Cruz pegó fuerte.

En números reales, un total de 58.504 santacruceños eligieron votar a la oposición y 40.111 decidieron apoyar a la boleta del kirchnerismo

Sin confirmación oficial, los trascendidos indican que la Gobernadora le pidió la renuncia a los funcionarios desde la subsecretaría hacia arriba para darle aire a la gestión de cara a las generales de noviembre, que son las que definirán los nuevos lugares en el Congreso de la Nación. Con las renuncias sobre la mesa, la mandataria definirá qué cargos va a prescindir y cuáles son los que se mantendrán.

El Frente de Todos incluso hizo una mala elección en la capital, Río Gallegos, distrito que había recuperado en 2019 luego de una serie de gobiernos radicales. Allí, donde hoy gobierna el intendente Pablo Grasso, terminó en tercer lugar. "No ganamos, no fue la elección que pensábamos", apuntó el jefe comunal en diálogo con Diario Nuevo Día.